El peso es una de las pocas monedas que no se depreció frente al dólar a pesar de los problemas que se sufren a nivel mundial: inflación, amenazas de recesión, crisis en las cadenas de suministro del comercio mundial, entre otras.
En cambio, el euro se fue acercando poco a poco a la paridad con el dólar, algo que no sucedía desde hace por lo menos 20 años y, el miércoles, llegó incluso a valer menos de un dólar.
El peso se depreció 1.5% con relación al dólar, entre el 31 de diciembre de 2021 y el 12 de julio de 2022.
En cambio, a la misma fecha, el euro ya había perdido 12% de su valor en comparación con el dólar.
Mientras el 31 de diciembre de 2021, cada euro se vendía por 1.13 dólares, entre el 12 y el 14 de julio de 2022 alcanzó mínimos de 0.995 dólares por euro.
El peso sobresale entre las monedas latinoamericanas
La caída en los precios de las materias primas, ante el temor de una recesión mundial, ha ocasionado que las diversas divisas de América Latina se deprecien frente al dólar.
No obstante, hasta el primero de junio de 2022, el peso se había fortalecido tanto que fue llamado súper peso. Había ganado una apreciación de 4% frente al dólar en los primeros cinco meses del año. Esto a pesar de que el el índice dólar, que mide el desempeño del billete verde frente a una cesta de divisas, había repuntado 7% en el mismo periodo y ha alcanzado niveles no vistos desde 2016.
La fortaleza del peso, sin embargo, se explica por algunos factores como el buen nivel de exportaciones (petroleras y de manufacturas), récords en la recepción de las remesas que envían los migrantes a las familias y la subida en la tasa de interés del Banco de México.
En junio, el Banco de México, siguiendo la tendencia del ajuste en Estados Unidos, elevó la tasa de referencia en 75 puntos base. Un aumento histórico. Y se espera que, como parte de las medidas para combatir la inflación, el banco central vuelva a elevar la tasa en la misma medida en su próxima decisión de política monetaria.
Las remesas, por su parte, alcanzaron un récord en mayo , al crecer 14.3% en comparación con el mismo mes de 2021.
El euro, por su parte, se debilitó recientemente ante las amenazas de una recesión en la Unión Europea. Además, sus tasas de interés no han subido tanto como en Estados Unidos y México. Y, finalmente, la extensión del conflicto bélico entre Ucrania y Rusia amenaza con provocar una crisis energética en el Viejo Continente.