El fortalecimiento del peso mexicano se ha mantenido estable respecto a otras monedas emergentes, incluso antes de la pandemia, por factores como el aumento de las remesas, el superávit comercial en los primeros meses de 2022, el diferencial de tasas de interés con la Reserva Federal y una perspectiva estable en la calificación crediticia para el país.
¿Por qué el peso resiste la incertidumbre económica global?
El mejor y peor nivel del peso mexicano en 2022
El factor más relevante que ha apoyado a la moneda nacional ha sido que las tasas de interés empezaron a subir, desde junio del año pasado, con mayor agresividad y con mayor magnitud en países emergentes. Otros factores que han ayudado al tipo de cambio tiene que ver con la recuperación de las remesas, en la parte final de 2020, todo 2021 y lo que va de este año. Las remesas han crecido a doble dígito entre 16% y 17%, lo que ayuda que las cuentas externas del país tengan cierta solidez.
En lo que va del año, el peor nivel que ha alcanzado la moneda es de 21.3 unidades por dólar en marzo y el mejor es de 19.5 pesos por billete verde en mayo.
“Varios de los elementos que pueden atribuirse al fortalecimiento de la moneda nacional tienen que ver con que Banco de México (Banxico) tiene diferenciales de tasas de interés bastante grandes y atractivos frente a los de EU. Otro elemento que ha estado contribuyendo a la fortaleza del peso frente al dólar es la entrada histórica de remesas desde 2020”, dijo Jessica Roldán, economista en jefe de Finamex.
Otro de los factores que explicaron los especialistas sobre la estabilidad del peso mexicano tiene que ver con el superávit comercial en 2021 y principios de este año, lo que reflejó la fuerte recuperación de la economía estadounidense, pero a un ritmo más lento que la mexicana, lo que generó un mayor volumen de exportación en relación a las importaciones, lo que derivó que las cuentas externas estuvieran relativamente en equilibrio.
Alejandro Saldaña, economista en jefe de Grupo Financiero Ve por Más, explicó que aunque este déficit comercial se ha empezado a revertir en los últimos meses, el buen dinamismo de las remesas, una tasa de interés atractiva y una buena calificación crediticia en la deuda del gobierno federal podrían mantener al peso un poco más resiliente que otras monedas a nivel global.
El país tiene una perspectiva relativamente favorable por sus políticas fiscal y monetaria. Además, se reconoce que hay un menor riesgo político en comparación con Brasil y Chile. Los analistas coincidieron que estos son algunos de los argumentos por los que inversionistas nacionales e internacionales ven atractivos los activos mexicanos.
Peso mexicano comparado con otras monedas
En lo que va de 2022, la moneda nacional es la cuarta divisa más apreciada, con 1.81% frente al dólar, en la canasta de monedas emergentes y la décimo cuarta a nivel mundial. Las otras monedas que le ganan valor a la moneda estadounidense son el rublo ruso, con 28.61%; el real brasileño, con 4.54%, y el sol peruano, con 1.29%.
“El peso mexicano es de las pocas monedas que han tenido una apreciación en lo que va del año frente al dólar, junto con el real brasileño. Si tú volteas a ver otras monedas, incluso de países desarrollados, tuvieron caídas muy severas, como el euro depreciándose 15%, la libra esterlina y el yen japonés. Esto refleja que la política monetaria en los países emergentes se empezó ajustar ante esos temores de inflación de forma más prematura o antes que países desarrollados”, indicó Alejandro Saldaña, economista en jefe de Grupo Financiero Ve por Más.
A nivel mundial, destaca la apreciación de monedas como el dram armenio, con 17.9%; el Afgani de Afganistán, con 17.5%; el peso uruguayo, con 8%; el franco guineano, con 7.5%; el peso dominicano, con 7.3%, y el kwacha zambiano, con 5.5%.
En la otra cara de la moneda, las divisas más depreciadas frente al dólar son la rupia srilanquesa, con 44.3%; el peso argentino, con 30%; la lira turca, con 28.2%; el forínt húngaro, con 23.6%; el yen japonés, con 20.2%; la libra esterlina, con 19.6%; el zloty polaco, con 18.4%, y el euro, con 14.5%.
Las divisas que se han depreciado en el mundo tienen que ver con dos factores, según Gabriela Siller, directora de análisis económico de Banco Base. La primera se relaciona con una política monetaria divergente a la Reserva Federal, como es el caso del yen japonés, del euro y la libra esterlina. La segunda causa tiene que ver al acercamiento geográfico a la guerra, en el que la moneda única europea sale doblemente afectada, mientras que la libra se ve perjudicada por factores específicos que tienen que ver con sus paquetes y reformas anunciadas para incrementar el déficit fiscal. El forínt húngaro y el zloty polaco tienen relación directa con la guerra.