Los precios del cobre superaron los 9,000 dólares la tonelada por primera vez desde junio, ante la esperanza de que la demanda china se recupere después de que el país eliminó sus restricciones por el COVID-19.
También ayudó la debilidad del dólar. Las expectativas de que las tasas de interés de Estados Unidos pronto dejarán de subir han llevado a la moneda a mínimos de siete meses, lo que hace que los metales cotizados en la divisa estadounidense sean más asequibles para los compradores con otras monedas.