"Las perspectivas a corto plazo se han deteriorado con los riesgos de recesión en Europa y Estados Unidos y una recuperación china que no ha sido intensiva en materias primas", dijo Ole Hansen, de Saxo Bank en Copenhague.
"Estamos cotizando muy por debajo de la media móvil de 200 días y nos ha costado recuperar ese nivel, lo que es una invitación a que haya más ventas en corto en el mercado, como hemos visto hoy", agregó.
La media móvil de 200 días, actualmente en 8,370 dólares la tonelada de cobre en la LME es un indicador clave utilizado por los operadores. Si el metal rojo no logra superar ese nivel, es probable que baje hasta la siguiente zona de soporte, en torno a los 7,850 dólares, añadió Hansen.
También presionaba a los metales la firmeza del dólar, que tocaba máximos de seis meses frente al yen, a medida que crecen las expectativas de que las tasas de interés en Estados Unidos se mantengan al alza más tiempo, mientras que el estancamiento en las negociaciones sobre el techo de la deuda mantenía frágil el sentimiento de riesgo.
Un índice dólar fuerte hace que las materias primas cotizadas en la divisa estadounidense sean más caras para los compradores que utilizan otras monedas.
En otros metales básicos, el aluminio en la LME bajaba un 1.5% a 2,230 dólares la tonelada; el níquel cedía un 1.7% a 21,050 dólares; el zinc caía 2.7% a un piso en 31 meses de 2,365 dólares; el plomo restaba 0.4% a 2,078.50 dólares; y el estaño perdía un 3.1% a 24,170 dólares.