Los precios del petróleo subieron el viernes después de que la Agencia Internacional de la Energía (AIE) pronosticó una demanda mundial récord y una reducción de la oferta, lo que llevó al barril a cerrar una séptima semana consecutiva de ganancias, la racha más larga desde 2022.
Los futuros del crudo Brent subieron 41 centavos, o un 0.5%, a 86.81 dólares el barril, mientras que los futuros del crudo West Texas Intermediate (WTI) estadounidense ganaron 37 centavos, o un 0.5%, a 83.19 dólares. En términos semanales, ambas referencias subieron alrededor de un 0.5%.