El cambio sorprendió a los brasileños durante el fin de semana y los boletines diarios pasaron a informar los casos y muertos en 24 horas, pero excluyeron a los fallecidos anteriores confirmados el mismo día, lo que vastos sectores políticos consideraron como un intento de ocultar o disimular la realidad.
Recomendamos
El ministerio de Salud informó el lunes que en adelante dará prioridad en sus balances al número de muertes acaecidas ese mismo día con diagnóstico de COVID-19. Pero aseguró en un comunicado, rebatiendo críticas, que en su nueva plataforma se podrá seguir visualizando "cuántas muertes se notificaron ese día, así como la fecha del óbito".
Con la nueva metodología, según el ministro de Salud interino Eduardo Pazuello, se tendrá el "dato real" y no se sumarán las muertes de un día a las ocurridas anteriormente y que en esa misma jornada se confirman como causadas por coronavirus.
Frente a las críticas generalizadas de los diputados, Pazuello intentó justificar que el nuevo modelo será "más efectivo para los gestores" sanitarios, pero aclaró que los datos también se ofrecerán de la forma anterior, "en favor de la mayor transparencia posible".
El presidente Bolsonaro defendió la publicación de cifras parciales y no totales, aunque el ministerio el domingo ya volvió a publicar estas últimas.