Pero Biden, quien por la pandemia optó por una campaña a ritmo moderado y sin grandes actos, también visitó tres veces Florida para cortejar especialmente a los jubilados; un electorado clave que en 2016 apoyó a Trump pero ahora parece tender a cambiar de posición.
Debido a lo reñido de la contienda, la noche de la votación gran parte de la atención seguramente se concentrará en Florida. Quien gane aquí obtendrá 29 votos del Colegio Electoral, considerados cruciales para lograr los 270 necesarios para llegar a la Casa Blanca, según el sistema de elección indirecta estadounidense.
En las presidenciales de 2000, la batalla por Florida entre el demócrata Al Gore y el republicano George W. Bush se definió en favor de éste por apenas 537 votos y tras una batalla judicial y varios recuentos.
La compañera de fórmula de Biden, la senadora Kamala Harris, visitó Florida para animar a sus seguidores a votar pronto, después de pasar el fin de semana fuera de la campaña como precaución porque un asesor dio positivo al COVID-19.
"Este hombre tuvo la oportunidad de lidiar con (el virus) pero negó los hechos, negó la ciencia y mintió al pueblo estadounidense", dijo Harris a sus partidarios en un acto con gente en automóvil en Orlando.
Trump, a quien se le acaba el tiempo para cambiar la dinámica de una carrera que parece estar perdiendo, se dirigió el lunes a Arizona en medio de señales de que los demócratas están liderando la votación anticipada.
Con información de AFP y Reuters