De hecho, Rusia, el país más enlutado de Europa con 134,500 decesos según su balance oficial, es el segundo con más decesos en las últimas 24 horas, por detrás de India (907) y por delante de Colombia (648).
Numerosas regiones, que enfrentan una tercera oleada epidémica que se extiende por Rusia desde mediados de junio, han hecho la vacunación obligatoria para determinados grupos de la población.
"Constatamos un aumento significativo da la tasa de vacunación", indicó Murashko y añadió que 23 millones de rusos, sobre 146 millones, han recibido al menos una dosis, pero sin especificar el índice de crecimiento de inoculación que esto representa durante un periodo determinado.
Afirmó que actualmente hay disponibles en el país suficientes dosis como para inmunizar a 32 millones de personas.
En Moscú, epicentro de esta tercera ola, la situación continúa siendo "extremadamente difícil", señaló el alcalde, Serguéi Sobianin, quien informó sobre casi 15,000 camas ocupadas —un 75% de las camas disponibles en la capital rusa— considerando este nivel "extremadamente alto, dado que una parte importante (de los pacientes) están en situación grave o muy grave, en cuidados intensivos”.
Las autoridades moscovitas reimpusieron el teletrabajo para algunos sectores, crearon una tarjeta sanitaria para ir a restaurantes o decretaron vacunación obligatoria para algunos trabajadores, ante la desconfianza de sus ciudadanos.
Pero, al igual que hicieron durante la última ola en diciembre, descartan un confinamiento estricto para preservar la economía.