España "trabaja con la comunidad científica" para, cuando llegue el momento, "pasar de una gestión de la pandemia a la gestión de una enfermedad que esperemos que la ciencia pueda convertir en endémica", reiteró el lunes 17 de enero el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, en una conferencia de prensa con el canciller alemán, Olaf Scholz.
La variante ómicron del Covid-19 ha multiplicado los casos como no lo había hecho ninguna antes, pero con menos muertes ni hospitalizaciones, lo que ha llevado a muchos gobiernos a suavizar las restricciones en plena sexta ola, dando unos pasos en la dirección a la que apunta España.
El primer ministro británico, Boris Johnson, anunció este miércoles el fin de las restricciones argumentando precisamente que el virus se está volviendo endémico.
"A medida que el Covid se hace endémico, tendremos que sustituir los requisitos legales por consejos y orientaciones, instando a las personas con el virus a ser cuidadosas y consideradas con los demás", dijo Johnson en el Parlamento.
Sin embargo, el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, replicó el martes que la pandemia "está lejos de haber terminado", avisando de que "es probable que surjan nuevas variantes".
La OMS avisó también contra la tentación de restarle importancia a una enfermedad endémica.
"Endémico en sí mismo no significa que sea bueno; endémico sólo significa que está aquí para siempre", dijo el martes el director de emergencias de la OMS, Michael Ryan, en una sesión virtual del Foro Económico Mundial, citando la malaria como ejemplo.
España está en una buena posición para abrir el debate, al contar con una de las tasas de vacunación más altas del mundo, con el 90.5% de su población mayor de 12 años totalmente inmunizada. "Con una tasa de vacunación alta, se puede superar la pandemia mejor", admitió el lunes el canciller alemán Scholz al lado de Sánchez.