Meses convulsos
El positivo de Isabel II llega en un momento de especial relevancia para ella, pero también de enorme convulsión en torno a la institución monárquica.
Hace solo dos semanas, cumplió 70 años de reinado, lo que la convirtió en la soberana más longeva en la historia de su país.
Las celebraciones por su Jubileo de Platino, que incluyen cuatro días festivos para toda la población, tendrán lugar en junio, cuando se prevén un gran número de festejos para homenajearla.
Sin embargo, la salud de la monarca, que siempre se ha caracterizado por su robustez, parece haber decaído después de que el pasado octubre pasase una noche ingresada en el hospital para ser sometida unos "exámenes preliminares", sin que Buckingham haya aclarado nunca el origen de sus dolencias.
Desde entonces, sus actos públicos se han vuelto más infrecuentes y en ellos se ha visto a una monarca algo más debilitada, que se ayuda de un bastón, pero que parece encontrarse en óptimas condiciones intelectuales.
En menos de 50 días, además, se cumplirá el primer aniversario de la muerte de su marido Felipe, duque de Edimburgo, a quien la reina se hallaba muy unida.
El positivo de Isabel II se ha conocido después de que el primer ministro haya confirmado que la semana entrante se levantarán todas las restricciones restantes para luchar contra la pandemia, incluido el aislamiento obligatorio para los contagiados, algo que ha despertado fuertes críticas entre la comunidad científica.