Publicidad
Publicidad

Pedro Castillo cumple un año al frente de Perú acosado por la justicia

El gobierno del izquierdista enfrenta un récord de cinco investigaciones fiscales por presunta corrupción y un Congreso que ha tratado de destituirlo en dos ocasiones.
jue 28 julio 2022 05:04 AM
El presidente de Perú, Pedro Castillo, saluda en el escenario durante la novena Cumbre de las Américas, en Los Ángeles, California, Estados Unidos.
Castillo, un maestro rural y sindicalista, ha sobrevivido a dos intentos de destitución "por incapacidad moral".

El presidente de Perú, el izquierdista Pedro Castillo, cumple este jueves un año de mandato con un récord de cinco investigaciones fiscales por presunta corrupción y el pertinaz asedio de un Congreso dominado por la derecha que exige su renuncia.

El panorama evoca la suerte de los expresidentes Pedro Pablo Kuczynski y Martín Vizcarra, quienes sobrevivieron a una primera moción de destitución, pero no a una segunda en 2018 y 2020 respectivamente, en medio de choques con el Congreso y denuncias de corrupción.

Publicidad

Este es el panorama al que se enfrenta Castillo a un año de haber asumido el cargo.

Con el congreso en contra

Castillo, un maestro rural y sindicalista, ha sobrevivido a dos intentos de destitución "por incapacidad moral", impulsados por un sector del Congreso descontento desde el inicio de su mandato.

Cuando este jueves acuda al Congreso para su primer mensaje anual en el día nacional de Perú, hallará un ambiente más crispado.

La reciente decisión de la fiscal de la nación, Patricia Benavides, de abrirle una nueva investigación por "obstrucción a la justicia" al proteger a tres miembros de su entorno prófugos ha avivado las brasas para un tercer pedido de destitución.

De momento, Castillo ha capeado el temporal ayudado por la corrupción y fragmentación del Congreso de 130 miembros, que carece de los 87 votos necesarios para separarlo del cargo.

"A los tres meses era evidente que era un presidente inepto y con una vocación por la corrupción muy grande", dijo el analista y economista Augusto Álvarez Rodrich.

Cinco investigaciones contra Castillo

La Fiscalía abrió cinco investigaciones contra Castillo, cuatro por casos ocurridos en su gobierno.

Las causas contemplan un presunto tráfico de influencias en la compra de combustible por la estatal Petroperú en 2021 y la supuesta obstrucción a la justicia en la destitución de un ministro de Interior.

Publicidad

También un presunto tráfico de influencias en un expediente de ascensos militares; supuesta corrupción y colusión agravada en un proyecto de obra pública, y por el plagio en su tesis universitaria.

El presidente niega vehementemente todos los cargos.

"No tengo nada que ver con actos irregulares o de corrupción. Soy un hombre honesto y siempre defenderé mi inocencia y honor", escribió en Twitter el 17 de junio.

La fiscalía, que es autónoma e impulsa la megainvestigación del caso Odebrecht que salpicó a otros cuatro presidentes peruanos, considera que hay indicios de que Castillo encabeza "una organización criminal" que involucra a su entorno político y familiar.

Sin embargo, no puede llevarlo a tribunales pues tiene inmunidad hasta el fin de su mandato en 2026.

"El ministerio público es independiente. Ha habido tantos testimonios y acusaciones que parecen estar bien fundados. No creo que estos sean fabricados", dijo a la AFP el analista Michael Shifter, del Diálogo Interamericano, con sede en Washington DC.

"Esto no es ideológico", estimó. "La corrupción no se limita al presidente y el Congreso también está muy involucrado y los miembros del Congreso se han beneficiado. Por eso tampoco quieren que lo destituyan. Quieren que esto continúe. Es una especie de equilibrio perverso".

El politólogo Carlos Meléndez, de la Universidad Diego Portales de Chile, cree que Castillo está aparentemente rodeado de "aventureros y oportunistas que pactan puntualmente para montar negocios indebidos aprovechando su cercanía con el poder".

Publicidad

El martes, el exsecretario de Castillo, Bruno Pacheco, buscado por cargos de corrupción, se entregó a las autoridades en otro golpe a la imagen del presidente.

Pacheco, quien esta prófugo desde hace cuatro meses, permanece bajo custodia de un equipo especial anticorrupción de la policía desde el sábado, cuando se puso en contacto con la fiscalía, de acuerdo con el organismo judicial.

"Quiero anunciar a todos los peruanos que el señor Bruno Pacheco se ha entregado a la justicia", dijo la fiscal general Patricia Benavides, en un discurso público durante una ceremonia previa a las fiestas de la Independencia de Perú esta semana.

En noviembre del año pasado tras un operativo autorizado, fiscales encontraron 20.000 dólares en el baño de la oficina de Pacheco, en el Palacio de Gobierno, en el marco de una investigación sobre presunta injerencia del Gobierno en el ascenso de oficiales de alto rango en las Fuerzas Armadas.

El mandatario, en un mensaje por Twitter, acogió la captura de su exasesor. "Para mi gobierno es satisfactorio que el señor Bruno Pacheco se haya puesto a disposición de la justicia. Eso evidencia la falsedad sobre la supuesta protección del Ejecutivo, esperamos que se imponga la verdad".

Los peruanos divididos entre la aprobación y el rechazo

Los peruanos están divididos sobre Castillo, quien canalizó en 2021 un voto de protesta como un rostro nuevo, ajeno a los partidos dominantes, salpicados por la corrupción.

"Nuestro presidente ahora se encuentra arrinconado por los políticos de la derecha, no le dejan gobernar y somos testigos todo el pueblo que este Congreso no deja gobernar", dijo a la AFP Areís Alfaro, de 56 años.

En la otra mano, Ingrid Chung, de 30, lo ve como "alguien más que nos ha venido a engañar". "Considero que no debería seguir y que está actualmente manchado de corrupción", dijo.

Su desaprobación en los sondeos subió a 74%, cuatro puntos más que en junio, según reciente encuesta de Ipsos. El Congreso también queda mal: un 79% lo desaprueba.

Castillo ganó inesperadamente las elecciones al frente de un pequeño partido de corte marxista-leninista con 50.12% de votos, en un reñido balotaje contra la derechista Keiko Fujimori, hija del expresidente Alberto Fujimori (1990-2000).

El resultado fue cuestionado por derechistas que alegaron fraude, pero fue avalado por la OEA y la Unión Europea.

Los votos en regiones mineras ayudaron a la elección de Castillo, y ahora éstos buscan pasar factura, según analistas.

Los comunidades ven "un gobierno recién elegido que les brinda una plataforma de apoyo para protestar de una manera en la que (piensan) que no habría repercusiones", dijo Troy Hey, gerente general de MMG en una llamada con analistas esta semana.

A pesar de la agitación social, las arcas de Perú recibieron un récord en impuestos mineros el 2021 y se espera otro el 2022, según el Ministerio de Economía que proyecta un crecimiento económico de un 3.6% este año gracias a los tributos mineros.

Eduardo Jiménez, de Macroconsult, refirió que en el último año el país desaprovechó el desarrollo de proyectos, cuando los precios de los minerales se ubicaron a precios históricos.

El cobre tocó en marzo precios récord, pero ha perdido hasta ahora poco más de 30% por temores a que una desaceleración económica en China, el principal consumidor de minerales, y una posible recesión global, frenen la demanda global del cobre.

"Pese a todo, el precio del cobre ha sido una suerte de contención de esta incertidumbre política", dijo Jiménez. La minería en Perú representa el 60% de las exportaciones del país.

Con información de AFP y Reuters

Tags

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad