Al ser desafiado por un manifestante en Detroit, Michigan, Obama respondió: "Señor, eso es exactamente lo que estoy tratando de decir. Tenemos un marco aquí en nuestra democracia. Soy yo el que está hablando, tendrá la oportunidad de hablar usted más tarde. Usted no haría eso en su lugar de trabajo".
Salir de la burbuja
Obama tiene razones para estar alerta: su partido sufrió una fuerte derrota en los comicios de medio mandato de 2010, durante su primer período.
"Hay un peligro inherente en el hecho de estar en la Casa Blanca y en la burbuja" del poder, dijo entonces acerca de las elecciones que suelen ser desfavorables al partido de gobierno.
Biden, que se suele presentar como un presidente cercano a la "clase media", alejado del microcosmos de Washington, parece no obstante estar encerrado en esa "burbuja" desde el inicio de la campaña.
Aunque se desplaza regularmente para levantar fondos para los demócratas, el presidente de 79 años, impopular, no se ha aventurado a hacer campaña en estados reñidos como Arizona. El presidente tiene una aprobación de 42.1%, de acuerdo con el promedio de encuestas de FiveThirtyEight.
En una entrevista este octubre, Obama incluso mostró preocupación sobre el camino adoptado por los líderes demócratas de adentrarse en polémicas abstractas sobre temas sociales complejos y cuestiones de vocabulario, corriendo el riesgo de parecer desconectados de las preocupaciones cotidianas de los estadounidenses, pero principalmente frente a la sencilla estrategia de los republicanos, que machacan contra la inseguridad y la inflación.
"Ser un poco más concretos y más prosaicos, creo que haría mucho para luchar contra la propaganda difundida continuamente por Fox News", la cadena favorita de la extrema derecha, afirmó Obama.
Con información de AFP