Erdogan, que se presenta a las elecciones de mayo, dijo en una visita a la zona de la catástrofe que las operaciones ya funcionaban con normalidad y prometió que nadie se quedaría sin hogar.
En declaraciones a los periodistas, con el ulular de las sirenas de las ambulancias de fondo, Erdogan dijo que había habido problemas con las carreteras y los aeropuertos, pero que "hoy estamos mejor”.
"Estaremos mejor mañana y después. Todavía tenemos algunos problemas con el combustible (...) pero también los superaremos", dijo.
Más tarde, condenó las críticas a la respuesta del gobierno. "Es tiempo de unidad, de solidaridad. En un periodo como éste, no puedo tolerar que la gente lleve a cabo campañas negativas por interés político", declaró Erdogan a la prensa a su llegada a la provincia meridional de Hatay.
"Unas personas deshonestas y sin honor publicaron falsas declaraciones como que no vieron soldados ni policías" en la provincia de Hatay, denunció Erdogan. "Nuestros soldados y nuestros policías son gente honorable. No dejaremos que personas poco recomendables hablen de ellos de esa manera" dijo.
El presidente turco afirmó que 21,000 miembros del personal de rescate fueron desplegados solo en la provincia de Hatay.
La catástrofe supondrá un desafío para Erdogan en las elecciones de mayo, que ya se preveían como la lucha más dura de sus dos décadas en el poder.Cualquier percepción de que el gobierno no está abordando la catástrofe adecuadamente podría perjudicar sus perspectivas.
Por otro lado, según los analistas, podría reunir el apoyo nacional en torno a la respuesta a la crisis y reforzar su posición.
Con información de AFP y Reuters