Una apuesta arriesgada para Trump
Mercedes Baltazar, experta en reputación, fundadora y directora de Meraki México, asegura que la actual campaña de Donald Trump ha estado mucho más dirigida a un público masculino que sus primeros dos intentos de llegar a la Casa Blanca.
“La campaña está abrazando esta postura, pues no voy a decir antimujeres, pero un poco sí, o sea, como esta postura más hacia el hombre fuerte”, indicó Baltazar en una entrevista con Expansión. “Está conectando muchísimo con todos los incels —los hombres jóvenes frustrados por su falta de relaciones con mujeres— que están creciendo”.
Sin embargo, este tipo de mensajes deja de lado a un electorado que puede ser clave para cumplir su ambición de ser presidente de Estados Unidos: las mujeres.
Ampliar el interés de Trump entre las mujeres es considerado clave por los analistas para el éxito electoral del republicano en los comicios del 5 noviembre, después de que obtuviera solo el 42% del voto femenino en las elecciones de 2020, frente al 57% del vencedor Joe Biden.
En 2016, Trump tuvo más apoyo entre las mujeres blancas que Hillary Clinton, 47% frente a 45%, de acuerdo con Pew Research. Entonces, su hija mayor, Ivanka Trump, una mujer emprendedora, aunque parte de una familia tradicional, era una de las grandes protagonistas de su campaña. En este año, Ivanka ha estado ausente.
En la Convención Nacional Republicana de julio hubo un intento coordinado del partido para suavizar los aspectos más ásperos del multimillonario de 78 años, con elogios de aliados cercanos y oponentes reconvertidos a su favor.