Israel, que no facilita cifras de muertos palestinos, afirma que unos 40 israelíes han muerto en ataques palestinos fuera de Gaza desde el 7 de octubre. Afirma que sus acciones en Cisjordania han sido necesarias para contrarrestar a los grupos militantes apoyados por Irán y evitar daños a civiles israelíes.
La guerra se desencadenó cuando Hamás atacó a Israel el 7 de octubre, matando a 1,200 personas y tomando a unos 250 rehenes, según los recuentos israelíes. El posterior ataque de Israel a Gaza ha matado a más de 41,000 palestinos, según el Ministerio de Salud del enclave.
Una crisis también para Israel
Israel, que ha apostado todo en su ofensiva contra la Franja de Gaza y recientemente ha extendido sus operaciones hasta Líbano, ha pagado con una importante desaceleración de su economía, una de las más importantes de Oriente Medio.
El conflicto es una apuesta cara para el gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu. El costo directo de financiar la guerra en Gaza hasta agosto fue de 100,000 millones de shekels (26,300 millones de dólares), de acuerdo con el Ministerio de Finanzas.
El Banco de Israel calcula que el total podría aumentar a 250,000 millones de shekels para finales de 2025, pero esa estimación se hizo antes de la incursión de Israel en el Líbano para luchar contra Hezbolá, lo que se sumará al recuento.