Ante esta situación, las empresas de marketing (medios de comunicación, relaciones públicas, producción de contenidos, servicios creativos, entre otras.), deben de replantearse inmediatamente la forma en que están organizadas, cómo monetizan sus destrezas y definen sus modelo de negocio.
Con una visión al futuro, en este artículo enlisto acciones que deberán de tomar las empresas de este ramo para tener acceso a un “boleto de supervivencia” dentro de esta larga (de por lo menos tres años) época de arenas movedizas, donde los lentos, poco flexibles y mal organizados perecerán.
1. Ajustar la estructura al mínimo. El talento humano es el activo más valioso de un medio o una agencia. Por ello, es necesario retener al personal crítico y con mayor talento. Aquí algunos criterios de selección para aplicar persona por persona: ¿te llevará al siguiente nivel?; ¿es “digital first o digital only”?, ¿genera negocios innovadores?; ¿su productividad es notable?; ¿realiza una labor esencial?; ¿se puede tercerizar su servicio? Fuera del personal clave, la empresa debe tercerizar funciones para lograr total flexibilidad, mejora contínua y costos variables.
2. Elimina costos y alinea indicadores. Línea por línea la empresa o área debe revisar los gastos y eliminar los no esenciales. Gastos de oficina, honorarios, servicios, estacionamientos, contratos en dólares, prestaciones, fondos de ahorro, licencias, plataformas inútiles o mal utilizadas, etc. Como parte de este esfuerzo es fundamental revisar TODOS los indicadores de desempeño de los creativos, los editores, los comerciales y los operadores.