Evitar compras de pánico. Una anécdota que se ha presentado para algunos en forma de mofa es la compra de papel de baño hasta llegar a un desabasto, quizá el más notorio, sin embargo, se ha presentado escasez de medicamentos, cervezas, artículos de limpieza e irónicamente hasta artículos deportivos, son artículos que no se tenían previsto en el hogar de las familias, lo que implica un gasto no planeado, generando así un problema grave: endeudamiento.
No hacer uso de los préstamos personales. Derivado del punto anterior, los bancos aprovecharon de forma excelente la situación ofreciendo préstamos personales. Erróneamente he escuchado a amigos y familiares solicitar ese crédito y creer que el dinero es suyo y no han considerado que lo deben pagar, quizá en cómodas mensualidades, pero con una nada atractiva tasa de interés, dejando así al acreedor con menor monto disponible de dinero cada mes. Los préstamos personales nos generan una mayor problemática que una solución.
Fomentar la cultura del ahorro. Para evitar hacer uso de los préstamos personales es necesario fomentar la cultura del ahorro, este tiene dos vertientes: la primera es afrontar posibles externalidades negativas que lleguen y pudieran vaciar nuestros bolsillos; la segunda está enfocada a un modelo económico.
En palabras sencillas, a medida que ahorramos, en una institución financiera, ellos podrán contar con más dinero para así hacer prestamos a empresarios que quieran invertir y, dicho de otro modo, fomentar la producción y los beneficios que ella conlleva.
Leer las letras chiquitas. No importa cuándo haya sido nuestra ultima visita al oftalmólogo, necesitamos leer las letras chiquitas. Si no lo han hecho están en tiempo, esta pandemia generó que varias instituciones financieras otorgaran atractivos apoyos a los usuarios. Claro, es mera mercadotecnica, te ofrecían diferir tu deuda hasta cuatro meses, pagar hasta que pasara la contingencia o incluso no faltó quien te ofreciera pago a plazo de tus compras.
¿Cuántos no habrán caído en sus garras? En cada contrato o promocional enviado había unas letras tan pequeñas que pocos leyeron, en las cuales, sí te ofrecían ciertos apoyos por ser usuario; sin embargo, en todos te hacen un cargo por comisiones por pago tardío o las compras a plazos a una tasa de interés. Recuerda que es el negocio de los bancos, nadie te regala nada.
OPINIÓN: La importancia de establecer un fondo para hacer frente a cualquier contingencia
Cuidar el uso de tus tarjetas de crédito. Durante esta cuarentena encerrados en casa nos han venido bombardeando con anuncios donde nos ofrecen cientos de productos para nuestra vida en casa, ya sea que quieras ser fit y comprar un equipo deportivo, que quieras incursionar en la repostería o gastronomía o quizá un equipo nuevo de televisión con unos atractivos videojuegos.
Muchos de nosotros dimos rienda suelta a nuestros antojos y nada tan sencillo como teclear los números de nuestro plástico bancario. Sumado a ello los gastos cotidianos de alimentación y pedir nuestros alimentos en línea se ha venido sumando a nuestra deuda, no olvides que no debes gastar más de tus ingresos.
6 apoyos del gobierno que puedes aprovechar en la contingencia