Al mismo tiempo, el capital humano latinoamericano es altamente competitivo, está muy bien formado y, a diferencia de lo que ocurre con otras locaciones como los países asiáticos, puede trabajar en husos horarios similares a los de Estados Unidos.
Un desarrollador latinoamericano tiene hoy excelentes oportunidades de sumarse a proyectos de enorme envergadura y alcance global. Y si bien el primer impulso es hacerlo bajo la modalidad freelance, existe una alternativa más sólida y estable y con mayores beneficios: sumarse formalmente al equipo de la organización en que va a desempeñarse con el apoyo de una empresa que brinde servicios de trabajo remoto gestionado.
Así se alcanza lo mejor de los dos mundos: la flexibilidad y la independencia de trabajar desde la propia casa con la seguridad y la contención de formar parte de un grupo de personas con las que se puede trabajar de manera colaborativa, debatir alternativas o solucionar los problemas que surjan.
Si bien este proceso puede variar de compañía en compañía, en líneas generales, si un desarrollador quisiera formar parte de un equipo de ingeniería de empresas con alto potencial radicadas en Estados Unidos, siguiendo este modelo innovador, las fases que debería atravesar pueden resumirse en las siguientes:
1. Entrevista inicial
Una primera entrevista en la que se realiza un ejercicio sencillo de desarrollo: básicamente, sirve como filtro para identificar capacidades técnicas mínimas en el postulante. Este encuentro nosotros lo denominamos full screening, ya que permite obtener una visión genérica y superficial de los talentos de quienes aplican.
2. Live coding
Aquellos que superan la primera instancia llegan a un segundo paso, casi siempre llevado a cabo a través de un videochat, en el que se les realiza una entrevista técnica y se les exige una tarea más compleja: completar un algoritmo en vivo (live coding) para computar un determinado problema y obtener un resultado.
En esta reunión aparece una figura clave para la relación futura del desarrollador que está aplicando con el equipo de trabajo del que va a formar parte: un profesional que lo acompaña en el desarrollo de su carrera y que lo ayudará a alcanzar su propósito dentro de la organización en la que se desempeñe.
3. Habilidades blandas
Si las dos primeras fases fueron atravesadas con éxito, se llega a la entrevista de management, centrada en las habilidades blandas. En la actualidad, el desarrollo de software es una tarea crítica en las empresas de todos los tamaños y de todas las industrias. Las aplicaciones y el manejo de datos están en el core de todas las organizaciones y su importancia crece en la medida en que lo hace la digitalización de los negocios.
