¿Quién y cuándo se sustituirá al líder británico? Algunas claves se pueden encontrar en el pasado reciente. Luego de la renuncia de David Cameron en 2016, a raíz de la votación del brexit, Johnson, entonces alcalde de Londres, era el favorito para sucederlo, pero en última instancia, se descartó a sí mismo, allanando el camino para que en menos de tres semanas Theresa May asumiera el cargo hasta su renuncia en 2019. Boris, ya un backbencher y brexiter férreo, la sustituyó a los dos meses, gozando de amplia popularidad. Algo similar podría pasar ahora.
Hay mucha presión para que ni siquiera se quede como premier interino, y su posición la asuma Dominic Raab (Viceprimer ministro). Incluso el exmandatario John Major señaló que "no sería inteligente que permanezca en el cargo mientras el partido elige un nuevo líder”. Si quieren nombrar a alguien más en el corto plazo, deberán hacerlo antes del 21 de julio, cuando el parlamento entra en receso, o en su caso, modificar las reglas del partido. Como Johnson sobrevivió a un voto de confianza el mes pasado, tiene un año de inmunidad para enfrentar otro.
Las fuerzas externas han ayudado a establecer el tono de la carrera. Johnson ayudó a protegerse de las críticas internas a través de su pleno apoyo a Ucrania, pero el principal beneficiario de esa política y de haber elevado las cifras del presupuesto en materia de defensa y rearme puede ser su secretario de Defensa, Ben Wallace, catalogado como el favorito para sucederle. De ser seleccionado, Wallace se convertiría en el primer primer ministro en servir en el Ejército desde 1976, cuando James Callaghan (Laborista) asumió el cargo.
Otras opciones que suenan son la actual secretaria de política comercial, Penny Mordaunt, o Tom Tugendhat, presidente del Comité de Asuntos Exteriores (ambos con experiencia militar); seguidos del ex ministro de finanzas Rishi Sunak, o la actual canciller Liz Truss, a juzgar por su salida anticipada de la reunión ministerial del G20 en Bali.
Antes de contender, los aspirantes deben reunir el apoyo de al menos ocho parlamentarios, e irse eliminando en una especie de votaciones primarias, hasta que quede un ganador.
¿Habría nuevas elecciones? No necesariamente. El/La nuevo(a) Primer Ministro podría buscar legitimidad ciudadana en las urnas, pero podría ser políticamente innecesario considerando que el Partido Conservador tiene una sólida matemática parlamentaria con cuarenta escaños arriba de la mayoría (365/650) y no se van a arriesgar a perderla pese a la crisis al interior de los Laboristas, liderados por Keir Starmer, y menos aún por el tumulto al interior de los tories (conservadores) por la salida de Boris o #Borexit.
