Sin embargo, el rápido crecimiento de la industria de las TIC enfrenta un desafío innegable: la escasez de talento de alta calidad. Según la previsión del Banco Mundial, habrá una brecha global de talento en TIC de 10 millones para 2027.
Los proveedores y operadores de infraestructuras de TIC desempeñarán un papel cada vez más importante a la hora de liderar el desarrollo de la futura economía digital. La innovación continua y un rápido desarrollo de la industria han acelerado este proceso de transformación, desencadenando e impulsando nuevos modelos económicos.
La economía digital global se está desarrollando rápidamente, se estima que más del 50% del PIB global estará digitalizado en 2022. Muchos países y regiones, incluidos algunos en la región de América Latina y el Caribe, han anunciado grandes inversiones para crear y actualizar su infraestructura digital (Infraestructura de conectividad y potencia de cómputo); además, las aplicaciones basadas en la nube han crecido significativamente alcanzando niveles de adopción históricos.
De acuerdo con Frost & Sullivan, México es el segundo mercado más grande de Infraestructura como Servicio (IaaS) en América Latina, detrás de Brasil. Se espera que la adopción de mercado de servicios en nube crezca de 6.3 a 27,000 millones de dólares en los próximos cinco años.
En la era del Internet de Todo (IoE, por sus siglas en inglés), nadie debe quedarse atrás; para desarrollar rápidamente el talento emergente en TIC se necesitan alianzas y ecosistemas. Las implementaciones de estrategias digitales nacionales, las investigaciones universitarias, el desarrollo de la industria, las operaciones comerciales y en general, cualquier unidad económica están desesperadas por las élites de las TIC.
En las próximas dos o tres décadas, el desarrollo tecnológico establecerá un mundo inteligente donde todo será monitoreado, conectado e inteligente, pero antes de que eso pueda suceder, la industria de las TIC requiere talento de alta calidad con ideas innovadoras y capacidades tecnológicas. El futuro de la industria estará impulsado por estos nuevos talentos, y aquellos que posean habilidades interdisciplinarias serán más buscados por empresas grandes y pequeñas por igual.
El desarrollo del talento es un desafío y requiere mucho tiempo. Se requiere tanto dedicación como una gran inversión para construir un ecosistema de talento que pueda prosperar. Cómo ponerse al día en términos de crecimiento digital es una cuestión de desarrollo importante para todas las partes interesadas. Los talentos digitales bien pueden ser la respuesta o al menos un buen primer paso: son la base de la nueva economía digital.
La colaboración profunda entre las partes interesadas (gobierno, organizaciones internacionales, academia y empresas) para abordar los desafíos del desarrollo del talento de las TIC es clave, cada uno tiene un papel muy importante que desempeñar. Las universidades y colegios están capacitando y educando directamente a los líderes y la parte más importante de la fuerza laboral de nuestro futuro.
Las empresas están contratando y al mismo tiempo dando forma a la generación más joven. Las autoridades gubernamentales, por supuesto, tienen un papel clave en la definición de las políticas y el fomento de las mejores prácticas.