Publicidad
Publicidad

Las cuatro C’s, las grandes aliadas para enfrentar los retos del siglo XXI

Los avances científico-tecnológicos generarán cambios paradigmáticos, mucho más profundos respecto de anteriores revoluciones industriales; un enorme desafío para la fuerza laboral y las empresas.
vie 21 julio 2023 12:00 AM
Group of workers working at a creative office
El pensamiento creativo no solo será necesario para ajustarnos a los nuevos paradigmas, sino, mucho más relevante, para edificar un futuro sostenible en sentido amplio -económico, social y ambiental-, considera Guillermo Fournier.

(Expansión) - La evolución tecnológica en la era contemporánea no tiene precedentes con tiempos pasados. Inteligencia artificial, automatización, la nube y el big data son elementos que, sin duda, revolucionarán en el futuro próximo la realidad tal como la conocemos.

Los avances científico-tecnológicos generarán cambios paradigmáticos, mucho más profundos respecto de anteriores revoluciones industriales, lo cual representará un enorme desafío para la fuerza laboral y las empresas.

Publicidad

Según el autor israelí Yuval Noah Harari la nueva tecnología conseguirá, en múltiples aspectos, ser más inteligente que los humanos para procesar datos e información, volviendo obsoletos varios puestos de trabajo.

De ser así, en las siguientes décadas, millones de abogados, arquitectos, contadores y demás profesionistas perderán sus fuentes preponderantes de ingresos. La pregunta es: ¿qué será de ellos y de gran cantidad de trabajadores hoy activos?

En mi opinión, la clave reside en la formación educativa de la siguiente generación de profesionales y empresarios. Por ello, resulta oportuno abordar las cuatro C’s como aliadas para hacer frente a un contexto de tribulaciones:

Uno

Pensamiento crítico -funciona mejor en inglés como “critical thinking” que empieza con la letra C-. Las escuelas y universidades debieran dejar a un lado la enseñanza basada en la memorización y centrarse en que los alumnos ejerzan su capacidad racional para cuestionar los fenómenos y problemas de su entorno, dando pie a la elaboración de soluciones viables.

De poco sirve registrar en la memoria fechas y hechos concretos, si ello no deriva en estimular el pensamiento racional, que lleve a los estudiantes a preocuparse por los retos y oportunidades del presente y el futuro. En pocas palabras, la educación debe ser la habilidad de responder a desafíos reales.

Dos

Colaboración es la capacidad de los seres humanos para trabajar en equipo. Cualquier logro de la raza humana que imaginemos, al menos, en el último siglo, ha sido producto de la cooperación entre personas.

Más aun, es conocido que, históricamente, los tiempos de guerra han sido sumamente fértiles en cuanto a desarrollo tecnológico y científico se refiere. Empero, ello se debe a la organización de fuerzas de trabajo especializadas y alineadas hacia un objetivo común -evidentemente, la motivación de vencer al enemigo no es la idónea para impulsar el progreso humano, aunque sí ha resultado muy potente-.

Si revalorizamos el poder de la cooperación entre pares, inculcándolo desde temprana edad en las nuevas generaciones, estaremos contribuyendo a crear grupos de individuos empoderados y capaces de superar problemáticas globales y complejas.

Tres

A través de la comunicación es posible establecer acuerdos y consensos respecto de prioridades por atender y metas por trazar. El lenguaje abstracto y sofisticado es lo que ha permitido a la humanidad evolucionar para convertirse en la especie dominante en el planeta, sobre otros seres vivos.

La cuestión es que los programas curriculares vigentes ponen poco o nulo interés en formar al alumnado como comunicadores efectivos, limitando considerablemente la práctica de herramientas que más tarde les servirían para ocupar posiciones de liderazgo y toma de decisiones.

Publicidad

Implementar modelos que ejerciten las habilidades comunicativas logrará formar líderes y profesionistas más empáticos, proactivos y eficientes. Las empresas del futuro lo agradecerán.

Cuatro

Probablemente, la creatividad sea la clave para desenvolvernos en un entorno vertiginoso, donde la adaptación al cambio resultará crucial para la supervivencia de empresas y organizaciones. La Revolución Industrial 4.0, como todo proceso transformador, tendrá por constante la incertidumbre.

El comercio, la socialización, el entretenimiento y demás actividades humanas evolucionarán en las siguientes décadas hasta tornarse irreconocibles en contraposición con lo que nos rodea en 2023.

Por tanto, el pensamiento creativo no solo será necesario para ajustarnos a los nuevos paradigmas, sino, mucho más relevante, para edificar un futuro sostenible en sentido amplio -económico, social y ambiental-.

Los hombres y mujeres de alto rendimiento dominarán el pensamiento crítico, el trabajo colaborativo, las habilidades comunicativas y la creatividad. Las cuatro C’s serán pilares sólidos en la construcción de un mañana prometedor para todos y todas.

____________________________

Nota del editor: José Guillermo Fournier Ramos es docente en la Universidad Anáhuac Mayab. Vicepresidente de Masters A.C., asociación civil promotora de la comunicación efectiva y el liderazgo social. También es asesor en comunicación e imagen, analista y doctorando en Gobierno. Síguelo en Twitter y en LinkedIn . Las opiniones expresadas en esta columna pertenecen exclusivamente al autor.

Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión

Publicidad

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad