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El camino hacia la tecnología inclusiva

En ocasiones, en el proceso de innovación tecnológica, los desarrolladores resuelven necesidades de sus pares e, involuntariamente, olvidan preguntarse si cualquier individuo es capaz de utilizarlas.
dom 06 agosto 2023 07:00 AM
Políticas inclusivas pueden mejorar calidad de vida de mujeres con discapacidad
Crear tecnología va más allá del diseño de máquinas automáticas y rápidas, existe para servir a las sociedades donde se desenvuelve la gente, por lo que su objetivo siempre será mejorar la calidad de vida de todas las personas sin excepción, apunta Manuel Macedo.

(Expansión) - La tecnología ha servido como un facilitador de nuestras tareas diarias y por medio de la innovación se han logrado solventar una gran cantidad de necesidades a medida que avanzamos como sociedad. Sin embargo, uno de los retos más importantes es diseñar herramientas y espacios adecuados e inclusivos para todas las personas.

En ocasiones, en el proceso de innovación tecnológica, los desarrolladores resuelven las necesidades de sus pares e, involuntariamente, olvidan preguntarse si cualquier individuo es capaz de utilizarlas.

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La diversidad es uno de nuestros principales valores como sociedad, ya que nos ayuda a imaginar y contar con un gran abanico de perspectivas y, sobre todo, a acoger a todas las personas como parte de nuestra comunidad. Por ello, al pensar en los espacios y tecnologías del futuro debemos incluir el objetivo de crear soluciones adaptadas a cada persona con cualquier tipo de discapacidad.

Según cifras del Banco Mundial, en el mundo, el 15 % de la población sufre alguna discapacidad, es decir, 1000 millones de personas, y existe una mayor concentración en países en desarrollo. Desgraciadamente, las personas con discapacidad tienen más probabilidades de sufrir un acceso inadecuado a la educación y condiciones laborales no óptimas. Ante este tipo de circunstancias, las innovaciones tecnológicas pueden ser un aliado para cerrar la brecha y construir instrumentos inclusivos y seguros que puedan ser aplicados en cualquier situación y espacio.

Edificios inteligentes

Es posible hacer de los edificios comerciales, escuelas y centros de trabajo lugares accesibles para personas con problemas de movilidad y facilitarles un acceso rápido y sin contacto, utilizando software que vigile el flujo de personas para evitar aglomeraciones. Asimismo, es viable obtener un mayor provecho de innovaciones personalizables como la regulación de la luz para personas con discapacidad o debilidad visual.

En cuanto a accidentes o manejo de eventos en lugares de difícil acceso como baños o escaleras, se pueden manejar de forma sencilla y cómoda con botones de pánico silencioso, los cuales pueden integrarse a programas de seguridad y manejo de crisis. Esto permitirá enviar una señal de auxilio a los encargados del edificio y, en caso de emergencias extremas, planear rutas de evacuación y alertar a los servicios de emergencia competentes.

Soluciones por voz

El uso de la voz ha tenido una amplia aplicación en la automatización por ser eficiente y fácil de usar, permitiendo controlar dispositivos de forma remota. En el caso de centros de trabajo, las herramientas de automatización por voz podrían ser un parteaguas para la inclusión de trabajadores con alguna discapacidad física, permitiéndoles hacer uso de teclados y dispositivos electrónicos sin necesidad de tocarlos.

Inteligencia artificial

En cuanto a personas con problemas de visión, el uso de la Inteligencia Artificial por medio del reconocimiento de imágenes puede ayudar a describir el entorno. Asimismo, los modelos de lenguaje pueden ser útiles para la población con dificultades para el habla, ayudando a proyectar y automatizar frases comunes en la vida diaria usando patrones con diferentes tipos y velocidades de voz que ayudan a transmitir más fielmente el sentimiento y personalidad. Incluso, para personas con problemas degenerativos del habla, se les puede ofrecer crear una voz sintética, para conservar la suya, por medio de grabaciones con la ayuda de estos programas.

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Podemos estar seguros de que conforme avance el tiempo, la gama de soluciones tecnológicas se irá incrementando y haciendo más sofisticada. Sin embargo, para construir el futuro próspero que todos nos merecemos debemos comenzar por incluir en los procesos de diseño y planeación el mayor número de perspectivas posibles. La visión de las personas con discapacidad y sus experiencias nos ayudarán a construir soluciones más completas y humanas. Y al mejorar su accesibilidad e inclusión mediante la tecnología podremos contribuir a que sean más autónomas y ayudarles a acceder a mejores oportunidades educativas, laborales y culturales, así como una vida más independiente e inclusiva.

Adicionalmente, es indispensable eliminar cualquier tipo de discriminación en los espacios sociales y de trabajo e impulsar la representatividad. Crear tecnología va más allá del diseño de máquinas automáticas y rápidas, existe para servir a las sociedades donde se desenvuelve la gente, por lo que su objetivo siempre será mejorar la calidad de vida de todas las personas sin excepción. Como actores en la construcción del futuro es nuestra responsabilidad cerrar las brechas culturales y tecnológicas porque un futuro en el que no se contemple a los demás implica retroceder en la historia de la innovación.

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Nota del editor: Manuel Macedo es presidente y CEO de Honeywell Latinoamérica. Síguelo en LinkedIn . Las opiniones publicadas en esta columna corresponden exclusivamente al autor.

Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión

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