Pero ante ello surge una pregunta importante ¿de qué dependerá el piso o tasa terminal de Banxico?, ¿dependerá de la inflación?
Sin duda, dentro de la ecuación se encuentra la variable inflación, pero probablemente no sea la única variable, también la tasa de la Reserva Federal (Fed) será fundamental en el piso de la tasa de Banxico, ¿por qué? Por el diferencial de las tasas de interés de Banxico y la Fed.
La tasa de interés refleja el costo del dinero. En mercados emergentes los rendimientos de los bonos son regularmente positivos y más atractivos que en países desarrollados. En ese sentido, el rendimiento de lo que paga Banxico contra la Fed es mucho más atractivo, pero también hay que considerar variables como riesgo país y cambiario.
En un horizonte de tiempo, si la Fed incrementa la tasa de interés en el corto plazo y la inflación no converja alrededor del 2% en el mediano plazo, la tasa de interés de la Fed podría permanecer más alta de lo que el mercado esperaría y sin duda limitaría el piso de las tasas de interés de mercados emergentes.
El mercado y los analistas podrían llegar a un consenso de cuánto sería la tasa de interés en el corto plazo, pero el punto de debate fundamental será el consenso de nivel de tasa que se encontrará en el mediano y largo plazo.
La tasa de interés de Banxico podría bajar tan rápido como la inflación vaya cediendo, sobre todo la inflación subyacente; en ese sentido, si la inflación converge a su objetivo de alrededor de 3%, la tasa de interés no podría bajar al mismo ritmo que la inflación porque el punto de referencia será la tasa de la Fed en 2025.
Es decir, a partir del mediano plazo, la velocidad y la tasa terminal de la tasa de Banxico será guiada por el diferencial de tasas que deberá tener Banxico con la Fed, que ha sido en promedio de alrededor de 400 puntos base.