Se trata de una oportunidad única para acelerar el progreso financiero y bancario, capitalizando las lecciones aprendidas y las tecnologías avanzadas de economías con mayor desarrollo. Existen varias maneras en que puede hacerse bajo el objetivo de aprovechar las soluciones tecnológicas y las mejores prácticas de los países desarrollados para modernizar los sistemas financieros y bancarios de los países emergentes y también los que se encuentran en vías de desarrollo.
También, es importante que los países emergentes inviertan en el desarrollo de capacidades locales en tecnología financiera, tienen la oportunidad de acortar la brecha en el desarrollo financiero y bancario al aprovechar las lecciones y tecnologías existentes.
Acciones que en paralelo se refuerzan con el aumento de los países emergentes. En los 80 solo se hablaba del bloque BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) y en los últimos tres años ya se mencionan a casi una veintena, entre estos México, Colombia, Turquía, Polonia y Tailandia, entre otros, por el desarrollo de su industria y producción, y sus elevadas cifras de comercio exterior.
Implementación y adaptación
Los países emergentes pueden implementar soluciones bancarias probadas, así como aprender de las mejores prácticas en economías más desarrolladas. Esto incluye el uso de aplicaciones móviles para la banca, sistemas de pago electrónico y plataformas de gestión de riesgos, entre otros. En lugar de construir infraestructuras desde cero pueden aprovechar, por ejemplo, la de telecomunicaciones existente para implementar estas soluciones y que se aproveche el uso de redes móviles y sistemas de comunicación de datos establecidos.
Es crucial que estas soluciones tecnológicas se adapten a las necesidades y regulaciones específicas de cada territorio. Esto puede implicar una modificación en la interfaz de usuario, integración con sistemas locales y el cumplimiento de regulaciones financieras particulares. Esta adaptación garantiza una implementación efectiva y sostenible de la tecnología.
Colaboración global
A través de asociaciones estratégicas se puede lograr un acercamiento a conocimientos especializados, recursos financieros y tecnología de vanguardia que de otra manera estarían fuera de su alcance. Externalizar ciertas funciones de TI y desarrollo de software puede ser una estrategia rentable para incorporar habilidades especializadas a un costo más bajo.
Además de adoptar tecnologías externas, es importante que los países emergentes inviertan en el desarrollo de capacidades locales en tecnología financiera. Esto incluye la formación de profesionales en programación, análisis de datos, ciberseguridad y otras áreas relevantes para la modernización de los sistemas financieros. Al fortalecer las habilidades locales, se garantiza una implementación efectiva y sostenible de la tecnología.