“Tu penalidad puede ser de por ejemplo 1,500 dólares, pero si el acuerdo por el derecho de formación es por decir de cinco millones de dólares que podría ser el reflejo de tu inversión, por el temor hace que muchos jugadores no se puedan mover. Si descubriste a Messi de los esports, quieres formarlos para que se vuelva una figura y no los vas a querer soltar porque tiene demasiado dinero invertido en él”, indicó Santiváñez.
Penalidades multas y despidos: El ProGamer sigue siendo un trabajador y al estar sujeto a una serie de cláusulas puede recibir sanciones en caso de incumplimientos. De acuerdo con el experto, se puede sancionar a un jugador por hacer uso de trampas durante un torneo -donde hasta se puede llegar a banear a un jugador de por vida y cobrarle una penalidad por afectar la imagen de un equipo.
Hace unos días, Jarvis Kaye, de 17 años, fue baneado por Epic Games tras hacer trampa durante una de sus transmisiones mientras jugaba Fortnite. El joven usó aimbot, un programa que ayuda a apuntar de forma automática y da en el blanco de forma precisa.