La gente se imagina a los jugadores de eSports como personas solitarias, que se pasan todo el día jugando en un cuarto oscuro, con latas de refresco y cajas de pizza a su alrededor. Y tal vez este escenario no está tan lejos de la realidad, pero en el caso del equipo canadiense, los jugadores viven en una casa con seis habitaciones para cada uno, con una pantalla de hasta más de 12 pulgadas cada una, además tienen un centro de entrenamiento que se encuentra en el sótano de los gamers para practicar en equipo, totalmente equipado con audífonos con micrófono integrado, teclados para jugadores profesionales y sillas que te hacen sentir como todo un gamer con tan solo sentarte en ellas, así como un gran patio con jardín donde se podrían hacer fiestas masivas.
De acuerdo con datos de los Raptors, este deporte online es observado por 500 millones de fans o al menos participan en alguna competición, pero en este equipo oriundo de Toronto hay jugadores de Canadá hasta de Estados Unidos que entrenan, van al gimnasio y conviven en los suburbios de Harding Boulevard, el cual es muy lujoso y más cuando la casa está a lado del lago.
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La casa que está al final de la calle es habitada por los jugadores durante toda la temporada de eSports (la cual concluyó en agosto), al entrar en ella una persona ajena se siente como en una película típica estadounidense pues en el interior la chimenea, los pisos de madera y la vista que te lleva al jardín hacen que te sientas protagonista de una película en live action.
Aunque los jugadores quieran vivir de por vida ahí no es posible, pues al final de la temporada la llamada “off season”, la casa se utiliza para otros eventos de eSports, además hay un concepto de bootcamps donde los equipos se pueden entrenar durante día y noche.