Los migrantes influencers
“Es la segunda ocasión en la que estoy cruzando esta selva (el Darién). En esta oportunidad lo hago para narrar y mostrar lo que aquí está ocurriendo con respecto a al inmigración. Es horrible”, dice Manuel Monterrosa en un video de YouTube que ha alcanzado más de 100,000 visualizaciones.
La periodista del NY Times, Julie Turkewitz , reportó la historia de Monterrosa. Él era un migrante venezolano que comenzó la travesía hacia Estados Unidos y, durante el viaje, grabó, editó y subió sus videos a YouTube. Pero cuando llegó a su destino, su alcance en la plataforma era tal que ya pudo monetizar el contenido, y decidió regresar a Venezuela.
Turkewitz entrevistó a Monterrosa y le dijo: “La migración vende. Mi público es un público que quiere un sueño”. Actualmente su canal de YouTube cuenta con más de 81,000 suscriptores y sus videos cuentan con cientos de comentarios.
Pero él no es el único que crea contenido sobre la travesía. En TikTok, el hashtag #SelvaDelDarien cuenta con más de 21,800 publicaciones, con videos que van desde entrevistas a los migrantes hasta imágenes de ellos cruzando tramos difíciles.
También existe el hashtag #SelvadelDarienHoy, en el que las personas suben vídeos con la fecha actualizando sobre su situación o mencionando los nombres de las personas que se encuentran con ellos. En los comentarios, los usuarios preguntan desde el costo por cruzar la selva hasta información para saber si alguien ha visto a sus seres queridos.
El negocio de la migración también es online
Detrás de la Plaza de la Soledad, ubicada en el Barrio de La Merced en la Ciudad de México, hay numerosos puestos con un cartel que dice: se cargan teléfonos por $10. En uno de ellos se encuentra Gabriel M, un migrante haitiano, dueño del negocio. El puesto cuenta con tres enchufes de carga múltiple en el que caben hasta 18 teléfonos. “Si no tienes cable aquí también te prestamos”, dice.
La travesía desde centroamérica hasta Estados Unidos no es nada económica e, incluso, cada vez se lucra más con esta actividad. Tan solo para cruzar la Selva del Darién, en grupos de Facebook se pueden encontrar “paquetes” que van desde los 60 dólares para los menores de 5 años hasta los 350 dólares para los mayores de 11 años.
Estos paquetes incluyen desde una noche de hotel en Necocli, un municipio en Colombia, el viaje en lancha desde Necocli hasta Acandi, el “pago de impuestos” para cruzar la Selva hasta el guía para realizar la travesía.
Las grandes tecnológicas, como YouTube, también lucran con esto. Los videos de los migrantes, como los de Manuel Monterrosa, comienzan con anuncios patrocinados como “Discover los Ángeles” o anuncios de los alineadores dentales “Moons”.
