“Vas a necesitar gasolinas de aquí a 2050 o 2060 y, al mismo tiempo, tienes que hacer crecer las energías limpias. De ahí el presidente ordenó que duplicáramos la generación de energías limas de aquí a 2023: solar, geotérmica, eólica y en eso estamos”, sostuvo el canciller.
En materia energética, los tres socios del T-MEC están en el proceso de consultas, buscando un acuerdo sobre la política que ha implementado en la materia el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
El gobierno mexicano ha insistido en que buscarán llegar a un acuerdo, privilegiando el diálogo, para evitar el panel de expertos.
La secretaria de Economía, Raquel Buenrostro, a principios de noviembre señaló que el tema energético es tan importante para México como para Estados Unidos, pues hay interés para relocalizar a 400 empresas en la región de Norteamérica.
Se habla de inversiones por 11,000 millones de dólares producto del nearshoring, sin embargo, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ve un potencial de más de 35,000 millones de dólares en México.
Otro punto en el que se tiene que trabajar es en aumentar la presencia de México en el Este de Estados Unidos.
“México tiene una participación de mercado en Estados Unidos de 13.9% al 1 de octubre. De Texas a California tenemos el 21%, en el medio Oeste tenemos 17%, de Florida a Virginia 9% y de Maryland a Maine 5%. México está vendiendo poco porque no tiene líneas de logística”, explicó Luis de la Calle.
“La manera de hacerlo es crear servicios marítimos regulares” entre los puertos de Coatzacoalcos y Progreso y el estado de Florida “para poner a la costa del Pacífico mexicano a 72 horas del mercado” del Este, agregó.
Si se logra ese propósito, subrayó, se verá desarrollo en la industria servicios y del sector energético, “transformadores” en la zona sur de la República.