¿Eres emprendedor?, este CEO tiene algunos consejos para ti

(CNN) - Un joven inició un negocio de recolección de chatarra con un camión destartalado, al cabo de tres décadas tiene cuatro marcas con 250 franquicias en Estados Unidos, Canadá y Australia. Esa es, en pocas palabras, la trayectoria del empresario Brian Scudamore.

En 1989, Scudamore fundó The Rubbish Boys como una forma de pagarse la universidad. Pero después de asistir a cuatro escuelas en cuatro años, pensó que aprendería más dirigiendo un negocio y dejó los estudios en 1993.

Luego de convertir ese primer negocio en el servicio líder de recolección de chatarra y cachivaches, ahora conocido como 1-800-GOT-JUNK ?, fundó y franquició otras tres empresas de servicio a domicilio: You Move Me, WOW 1-Day Painting y Shack Shine.

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Combinadas, las cuatro marcas emplean a más de 5,000 personas, incluidas 500 que trabajan en O2E Brands, la compañía matriz. Scudamore espera que los ingresos totales asciendan a 400 millones de dólares este año.

Su primer libro WTF?!: Willing to Fail, que describe su accidentado viaje como empresario, se publicó el otoño pasado.

CNN conversó con Scudamore sobre los obstáculos que enfrentan los emprendedores, su peor error y cómo se desconecta del trabajo.

Esta es la versión editada de esa conversación.

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¿Cuál es el error más común que ves que cometen los emprendedores?

No quieren admitir sus fracasos. No quieren ser transparentes con su equipo. No quieren decirle a su equipo que están asustados o deprimidos.

Mi deseo es que la gente diga: "Esto es lo que está pasando. Así es como me siento". De lo contrario nuestros equipos no nos creen y no confiarán en nosotros. No puedes tener confianza sin vulnerabilidad.

Y no estás liderando si no hay nadie detrás de ti. Tienes que tener gente que confíe en ti.

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¿Cuál es el peor error que has cometido en los negocios?

Tuve un director de operaciones que era mi mejor amigo. Juntos crecimos el negocio de 2 millones de dólares a 106 millones de dólares. Pero tuve que despedirlo cuando me di cuenta de que necesitábamos un líder diferente para llevarnos al siguiente nivel. (Todavía somos grandes amigos, afortunadamente.)

Pero aunque me dio miedo, la parte más aterradora para mí es que luego contraté a una segunda directora de operaciones de Starbucks. Juntos casi arruinamos el negocio. Ella gastaba demasiado, no estábamos alineados con las decisiones, la visión se estaba desviando y la crisis financiera no ayudaba.

Así que 14 meses después terminé esa relación porque había tomado la decisión equivocada. Esta persona no creía en los emprendedores. Ella creía que para construir la corporación había que traer a especialistas externos.

¿Y el reto? Ninguna persona en mi compañía pensó que hice lo correcto al despedirla.

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Estaba enojado y frustrado. Pero me dije que tenía que aprender algo de esto, de lo contrario nunca lo superaría.

En una hoja de papel enumeré todas las cosas del negocio en las que soy bueno y me encanta hacer. Luego enumeré en qué soy malo y lo que no me gusta hacer. Necesitaba encontrar a alguien que viera valor en lo que yo hacía, pero que fuera bueno en todas estas otras cosas.

Así que escribí esta descripción de tres párrafos para encontrar a esa persona y la envié a todos en mi red de contactos. Tres personas diferentes, por separado, me dijeron: "La persona que describiste es Erik Church". No me dijeron, “mira, aquí tienes tres nombres”, me dijeron directamente "Erik Church". Church había sido el brazo derecho de fundadores de otras compañías exitosas y había iniciado una fraternidad universitaria con mi mejor amigo, el primer director de operaciones.

Lleva con nosotros siete años y ambos creemos que será para siempre porque hay algo mágico en lo que hacemos juntos.

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Se suponía que tu negocio era para pagar la universidad. ¿Qué te impulsó a seguir haciéndolo?

Me apasionaba ver a nuestros empleados y clientes sonreír y vivir vidas felices y divertidas. Nuestros empleados son los mejores y si hacemos un gran trabajo sorprendiéndolos, ellos a su vez sorprenderán a nuestros clientes.

¿Cómo haces que tus empleados sean los mejores?

Hay una gran diferencia entre ganarse la vida y hacerse una vida. Tratamos de ayudar a nuestra gente a enfocarse en hacer una vida. Les damos cinco semanas de vacaciones pagadas, más días festivos. Y les damos más tiempo si lo necesitan. Los animamos a desconectarse por completo del correo electrónico durante las vacaciones.

Trato de liderar con el ejemplo. No trabajo los fines de semana. No reviso el correo electrónico los fines de semana el 90% del tiempo.

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En vacaciones, me doy el 100% del tiempo porque le doy permiso a mi asistente para que cambie mi contraseña a mis redes sociales y correo electrónico. No sé como entrar.

No quiero ser esa persona que está pegada al teléfono cuando estoy fuera con mis tres hijos pequeños, a menos que lo use para tomar fotos.

¿Tener una familia te ha enseñado algo sobre los negocios?

Intento liderar e inspirar a mis hijos de la misma manera que lideraría e inspiraría a los empleados. Me encanta ayudar a que las personas vean que pueden hacer lo que creen que pueden.

Quiero que la gente llegue al mejor lugar posible.

¿Cuántas vacaciones tomas al año?

Tomo de cuatro a cinco semanas juntas como vacaciones de verano. Hace dos años fuimos a la India para ayudar a construir una escuela con mis hijos. El año pasado fuimos a Kenia. Intento hacer algo que esté fuera de mi zona de confort.

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Luego tomo unas tres semanas en Navidad, mis vacaciones de esquí con la familia.

¿Cuánto duermes?

Siete horas y media, soy muy disciplinado.

Valoro el sueño porque me da energía y la capacidad de concentrarme.

Tengo déficit de atención. He sufrido mi parte de depresión y ataques de pánico en los últimos años. Así que sé que es difícil viajar y trabajar y estar ocupado si no me cuido y mantengo un poco de equilibrio.