¿Podrá el nuevo CEO de General Electric enderezar el barco?
NUEVA YORK (CNNMoney) - General Electric está recurriendo a alguien externo para limpiar un desastre que tardó décadas en crear.
Larry Culp, de 55 años, es un líder comprobado, conocido por su enfoque práctico. Recibió una bienvenida de héroe por parte de Wall Street el lunes, después de ser repentinamente instalado como el nuevo jefe de GE. La cotización de las acciones de GE se disparó 10%.
Culp, quien se convirtió en CEO del fabricante industrial Danaher con solo 37 años, enfrenta la monumental tarea de restaurar la grandeza de GE. El icónico fabricante de focos, de máquinas de resonancia magnética y motores a reacción se está desangrando por negocios mal sincronizados, por la complejidad innecesaria de su estructura corporativa y por la creciente deuda.
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Casi medio billón de dólares se ha evaporado del valor de mercado de GE en los últimos 18 años. Eso es aproximadamente el tamaño de Facebook.
GE, una compañía que se enorgullece de su excelencia en la gestión, está tan desesperada que, por primera vez en sus 126 años de historia, está siendo dirigida por un externo.
“GE ha sido como ver un lento (pero fatal) choque de trenes", escribió el lunes Scott Davis, analista principal de Melius Research, a sus clientes.
“Desembrollar 15 años de malas decisiones requerirá de valor”, pero Davis agregó: “No me gustaría apostar contra Larry”.
Culp aporta credibilidad
Al traer sangre fresca, GE está apostando a que podrá acelerar un plan de cambio iniciado bajo el mando de John Flannery, un veterano de 30 años en la compañía que fue expulsado sin ceremonias como CEO para abrir paso a Culp.
“GE debe ser elogiado por elegir a un externo que es un experto creíble y experimentado”, escribió el analista de Cowen, Gautam Khanna, a sus clientes. Es probable que Culp “identifique con más franqueza y rapidez lo mal que posiblemente están las cosas”.
Culp construyó un impresionante historial mientras lideraba a Danaher entre 2001 y 2015. Los ingresos y la capitalización de mercado de la compañía se quintuplicaron durante ese tiempo.
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Al graduado de la Escuela de Negocios de Harvard se le atribuye la conversión de Danaher de un cansado fabricante en una empresa moderna con sólidos negocios en ciencias de la salud y tecnología. Impulsó a Danaher hacia la atención médica, un negocio que hoy vende herramientas, luces y software utilizados por dentistas.
“Tiene las destrezas para hacerse cargo de una empresa de este tamaño”, dijo Jim Corridore, analista que cubre GE en CFRA Research.
Amortización “perturbadora”
Khanna aplaudió el historial de Culp de asignación “prudente” de capital en Danaher, señalando que aproximadamente 25,000 millones de dólares fueron utilizados durante su mandato.
Después de años de malas decisiones que causaron una acumulación de deuda, GE necesita desesperadamente un fuerte administrador de sus recursos agotados. Los analistas dicen que bajo la dirección del expresidente ejecutivo Jeff Immelt, GE con demasiada frecuencia compraba caro y vendía a bajo precio.
Considera la desastrosa compra de Alstom en 2015, una adquisición de 9,500 millones de dólares que impulsó a GE Power más hacia el consumo de combustibles fósiles, precisamente en el momento equivocado. GE Power está en tal desorganización actualmente que la compañía anunció que tendrá que tomar una amortización contable de hasta 23,000 millones de dólares para reflejar el deterioro de los negocios adquiridos.
“El tamaño de la amortización es preocupante”, dijo Corridore.
Flannery tomó control de una empresa en caos cuando se convirtió en CEO el año pasado. Aunque merece el crédito por destapar los “trapos sucios” que descubrió, Flannery no se movió lo suficientemente rápido como para restablecer la confianza entre los accionistas.
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“Fue realmente difícil para John Flannery escapar del mal juego que heredó”, dijo Jeff Sonnenfeld, una autoridad en gobierno corporativo de la Escuela de Administración de Yale.
En un comunicado, Immelt predijo que GE Power se recuperaría bajo el nuevo equipo de liderazgo debido a su tecnología y talento superiores.
“Larry Culp será un líder sólido para GE y su consejo directivo. Su experiencia y pericia están perfectamente alineadas con las necesidades de la empresa”, dijo Immelt.
¿Continuará GE su reestructuración?
Ahora, Culp debe decidir si seguir adelante con el plan de reestructuración de Flannery. Culp se unió al consejo de GE en abril, lo que significa que aprobó el plan de Flannery para reconstruir la empresa en torno a la energía, a su negocio en auge de la aviación y a la energía renovable.
La reorganización requeriría que GE se deshaga de sus negocios de cuidado de la salud, ferrocarriles, bombillas y petróleo y gas, y que utilice esos ingresos para pagar su deuda.
Considerando la historia de Culp en el sector de cuidado de la salud en Danaher, Sonnenfeld predijo que GE podría decidir mantener su propia división de atención médica.
La vasta estructura corporativa de GE, construida durante décadas por Immelt y Welch, podría verse recortada bajo el mando de Culp.
Culp dirigió a Danaher con menos de 100 empleados en la oficina corporativa, y Davis dijo que es probable que el nuevo presidente ejecutivo “reduzca a la empresa a las funciones necesarias y destruya todos los feudos”.
El gran desafío por delante
Pero la reducción de costos por sí sola no reparará a GE.
Culp necesita llegar rápidamente al fondo del problema en GE Power. El negocio no solo se enfrenta a un desafío serio por parte de la energía renovable, sino que las fallas en las aspas que surgieron recientemente apuntan a potenciales problemas de calidad.
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GE también enfrenta un gran déficit de pensiones causado por años de falta de atención y bajas tasas de interés.
Y además está el fantasma de GE Capital, el brazo financiero que casi acabó con GE hace una década durante la crisis financiera. Culp será el encargado de reducir de forma segura el tamaño de GE Capital mientras esquiva minas terrestres, como WMC Mortgage, el extinto negocio de hipotecas de alto riesgo que está siendo investigado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
En el resto de GE Capital, Culp necesita estabilizar la cartera de seguros a largo plazo, que sufrió una pérdida de 6,000 millones de dólares en enero. La noticia provocó una investigación de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC por sus siglas en inglés): la segunda que la empresa enfrenta actualmente.
Al contratar a Culp, puede que GE haya mejorado rápidamente su grave problema de credibilidad en Wall Street. Pero no nos dejemos engañar: enderezar el barco tomará mucho más tiempo.