La fabricante alemana de dispositivos médicos B. Braun invirtió 80 millones de pesos en México en la apertura de un nuevo centro de distribución en el Estado de México, con el objetivo de tener mayor infraestructura para el crecimiento que prevén en el país.
La firma de dispositivos médicos B. Braun sube su inversión en México
En noviembre, B. Braun abrió un centro de distribución con en el Estado de México con 4,600 metros cuadrados de superficie. Este centro pretende soportar el crecimiento de la empresa en México e, incluso, abrir la puerta a traer más producción, adelantó Alberto Phillips, director de Finanzas de B. Braun México.
Anualmente, la empresa crece alrededor de 15% en México, y hasta 25% con ciertos productos enfocados a la hemodiálisis, en contraste con el crecimiento promedio de 7.9% la industria en los últimos siete años. De acuerdo con datos de KPMG, el mercado de dispositivos médicos en México tuvo un valor 4,909 millones de dólares en 2017 y representó el 0.21% del PIB.
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La estrategia de crecimiento en México está enfocada en ganar participación de mercado en ciertas categorías mediante un mejor servicio al cliente, uno de los diferenciadores de la empresa frente a la competencia, mencionó Phillips.
“Nosotros buscamos entender las necesidades del cliente, su operación y procesos para ofrecer soluciones integrales. Tenemos una línea de consultoría hospitalaria a través de la cual podemos eficientar el manejo de quirófano con el flujo de cirugías”, lo que distingue a la empresa de otras del sector, pues buscan ser socios y no solo proveedores, destacó Phillips.
La empresa opera cuatro divisiones: Hospital Care, que representa el 60% de las ventas a escala global del grupo; la marca propia Aesculap, que es equipamiento quirúrgico; OPM, la división más joven de la empresa dedicada a productos de higiene como jabones, antisépticos y apósitos; y Avitum, la división de hemodiálisis, con la que ha crecido más la empresa en México, con tasas anuales de hasta 25%.
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La compañía llegó directamente a México en 1992 vía un joint venture que duró dos años y cuyo principal cliente fueron los institutos de salud pública al que proveía de instrumentos para quirófano, Aesculap. Entre la capacidad instalada que tienen en el país, se encuentra su centro de distribución y una planta aledaña donde fabrica productos de osteosíntesis como placas, tornillos y alambres, y que se envía en un 70% al extranjero.
Phillips explicó que en el terreno de más de 29,000 metros cuadrados donde está el centro de distribución aún hay espacio para crecer y anticipó que B. Braun buscaría traer más producción al país. “Tenemos un terreno bastante grande todavía y parte de los proyectos a futuro es ver si podemos traer más producción a México. Hay una gama tan amplia de productos que creo que dependerá mucho de los proyectos estratégicos del grupo y de México y que tuviera sinergias que pudieran ir más allá de México”, agregó.