Eduardo Berrón, delegado de Campeche de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), dice que otro de los impedimento sería la logística. Tendrían que considerar operaciones de carga para subir las mercancías al tren y luego para su descenso, lo que sumaría entre cinco y seis horas al primer conteo. “No es lo mismo que podemos hacer nosotros, de puerta a puerta, a lo que genera una segunda o tercera logística hasta el punto final, entonces realmente no lo vemos como competencia”, menciona en una entrevista con Expansión.
De momento son 473 kilómetros los habilitados de la estación de San Francisco de Campeche a Cancún en la ruta del Tren Maya, recorrido que suma 14 paradas. La incógnita queda en si las operaciones de carga podrían realizarse en las estaciones dentro de este tramo, pues estas necesitarían infraestructura adicional.
En la industria del autotransporte de carga existen diferentes tipos de camiones dependiendo de las mercancías a trasladar. Por ejemplo, las cualidades de una unidad para transportar productos de paquetería son distintas a aquellas enfocadas en el traslado de alimentos que, en algunos casos, llegan a necesitar refrigeradores con temperaturas debajo de los cero grados. La duda sobre el proyecto ferroviario también yace en si en algún momento se contará o no con este tipo de especificaciones.
"El transporte carga sería una falacia porque el cliente va a necesitar de las estaciones que tiene o los centros de carga, [es decir, de] la transportación hasta su punto final, que es la logística de sus bodegas o establecimientos, por lo que en lugar de ser un beneficio se incrementaría en tiempos y costos (...). Nuestra logística es diferente. No nos da temor a que se haga [el traslado de mercancías en el tren]. El único afectado ahí seria nuestro cliente, lo que terminaría repercutiendo en el consumidor final”, añade.
La construcción del Tren Maya ha traído un dinamismo económico para Campeche no visto anteriormente. Como ejemplo, la Canacar estima que la actividad enfocada al traslado de materiales para la construcción repuntó entre 30 y 40% en los últimos meses y la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Campeche (Canaco Servytur Campeche) estima que ésta aumentó alrededor de 30%.
Para la entidad, el proyecto ferroviario se está convirtiendo en una “moneda al aire” . Las expectativas están puestas en un impulso a la actividad turística para que el estado deje de verse como un destino de paso para llegar a Mérida o Cancún.
“Esos lugares donde va a atravesar (el tren) tienen que desarrollar comercio, servicios, instalar hoteles, hospedajes, donde comer, servicios en lo general, desde lo básico como salud, estar preparados como población para esa dinámica que no teníamos antes. Estábamos al ritmo que nos requería el estado y esto nos va a requerir más, lo que implica capacitación, herramientas”, dice Luis Pinzón Charles, vicepresidente de Canaco Servytur Campeche.
Las actividades terciarias, resalta, podrían aumentar en no menos de 30% ahora que el Tren Maya está en operación.