Todo comenzó a las 11:15 de la mañana del martes. El funcionario anunció a través de su cuenta de Twitter su dimisión. En una carta publicada, Urzúa señaló que entre las razones de su renuncia se encontraba que las decisiones que ha tomado la administración en materia de política pública no tienen sustento. Además, comentó que le parecía “inaceptable la imposición de funcionarios que no tienen conocimiento de la Hacienda Pública”.
Tras el anuncio, los mercados reaccionaron negativamente. La moneda mexicana llegó a depreciarse hasta 2.5% a 19.35 pesos por dólar, pero luego redujo su descenso y cerró en 19.16 unidades por dólar, una baja de 1.3%.
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Media hora después del tuit del exfuncionario, el principal índice de la BMV, el IPC, caía 1.8% a 42,817.9 unidades.
“La noticia manda una mala señal a los mercados. Viniendo de él llama mucho la atención, porque él es muy ortodoxo y los mercados lo tenían en buena percepción. No solo es la renuncia, sino también los motivos lo que lo hacen ver muy negativo”, comenta Carlos González, director de Análisis y Estrategia Bursátil de Monex.