El papel de Robinhood y de otras plataformas de inversión
La euforia por GameStop y todo lo que se desencadenó no hubiera sido posible sin las plataformas de inversión digitales que permiten que, desde montos pequeños, se pueda tener acceso al mercado.
En el mundo hay cientos de ellas. De hecho, el efecto GameStop también se vivió en México. GBM+ es la principal plataforma de inversión del país, con una participación de 54% del total de cuentas, de acuerdo con datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores. “Tuvimos el doble de personas, tanto en tráfico como concurrencia, de nuestro pico histórico. Fue una semana de muchísima demanda, tanto de operar estas acciones como también abrir nuevas cuentas”, cuenta Javier Martínez, director de GBM digital.
A la mitad de la locura por GameStop, algunas plataformas anunciaron limitaciones para las operaciones en las acciones de la empresa. Una de las razones detrás de esta limitación se debió a que las plataformas no tuvieron la capacidad para cumplir con uno de los reglamentos del mercado. Los reguladores exigen a los brokers que tengan una cobertura por el riesgo al que están expuestos, lo que se le llama colateral, y que funciona como una garantía. Robinhood, una de las plataforma de inversión más importantes en Estados Unidos, el mercado más grande, tuvo que recurrir a una ronda de financiamiento en la que levantó 1,000 mdd para poder hacer frente a esto.
En el caso de GBM+, la firma alertó a sus usuarios de potenciales riesgos en estos instrumentos, pero nunca limitó la compra y venta de acciones. Eso sí, debido a la alta volatilidad, solo podían usar las “órdenes limitadas”, esto es, que el inversionista establezca un precio de compra o venta. El otro tipo de órdenes, las de algoritmos, como los famosos 'stop loss', que ejecutan las operaciones solo si se cumplen ciertas acciones y precios, pueden fallar en entornos de altísima volatilidad, debido a que los movimientos son demasiados y extremadamente rápidos, con lo que se corre el riesgo de que las operaciones no se concreten, explica Javier Martínez.
A los inversionistas no les gustó que los limitaran (aunque esto en realidad fue para cumplir con una regla para protegerlos) y estallaron en quejas en redes sociales contra las diversas plataformas. Ahora, Robinhood está en el ojo de las autoridades.
De acuerdo con varios (enojados) usuarios de Reddit, Robinhood limitó las operaciones para que Melvin Capital no perdiera más, interfiriendo con el libre mercado, beneficiando a grandes fondos y perjudicando a los pequeños inversionistas.
El argumento es que Citadel, la firma que le metió el capital de emergencia a Melvin Capital, es uno de los principales clientes de Robinhood. Según el Financial Times, Citadel representa el 35% de los ingresos de Robinhood.
No es la primera vez que Robinhood se ve metida en este tipo de escándalos. En diciembre, la firma se comprometió a pagar una multa por 65 millones de dólares, luego de que Comisión del Mercado de Valores de Estados Unidos (SEC) la acusó de engañar a sus usuarios: se declaraba como libre de comisiones, pero ejecutaba las operaciones debajo del precio que obtenían otros brokers, obteniendo ganancias de la diferencia, con lo que incumplía su promesa de ejecutar la operación más beneficiosa para el usuario cuando se emitía una orden de compraventa.