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Tras su derrota el en campo de batalla, el ISIS abre un nuevo capítulo de horror

Expertos en contraterrorismo afirman que los ataques de Sri Lanka no pudieron ocurrir sin ayuda externa, ¿el Estado islámico está exportando su conocimiento en atentados?
mar 30 abril 2019 05:04 AM
Horror.
Horror. Una serie de atentados en iglesias y hoteles de Sri Lanka dejó más de 250 muertos el 21 de abril.

(CNN)- En el video de 59 segundos se ve a ocho hombres jurando lealtad al "emir de los creyentes" y al "califato de los musulmanes". Estaban a punto de perpetrar una serie de ataques devastadores en Sri Lanka, atrocidad que cobró la vida de más de 250 personas y que al mismo tiempo dejó patente que ISIS no se ha extinguido como amenaza mundial.

A unos días de los ataques, la publicación electrónica de ISIS, Al Nabaa, presumió que "izará el pendón del califato en arenas nuevas. Los días están preñados de decepciones para los enemigos de Alá". Una agencia noticiosa relacionada con el Estado Islámico (ISIS) publicó el video.

Todavía hay mucho que aprender sobre la organización responsable de los ataques en Sri Lanka, pero los expertos en contraterrorismo coinciden en una cosa: los grupos islamistas pequeños en la isla no pudieron haber perpetrado este ataque complejo sin ayuda externa.

Bruce Hoffman, analista de contraterrorismo del Consejo sobre Relaciones Exteriores de Estados Unidos, dijo que los ataques del Domingo de Pascua habrían sido "un salto en el orden de magnitud de las capacidades de organización y logística de cualquier grupo extremista".

Eso suscita varias preguntas: ¿ISIS está logrando exportar sus conocimientos de fabricación de bombas, recaudación de fondos y reclutamiento mucho más allá del que era su territorio principal? ¿En dónde encontró terreno fértil? ¿Qué tan capaz es el núcleo de ISIS —sujeto a una atroz guerra de desgaste desde hace tres años— de organizar y dirigir ataques lejos de su territorio principal?

Escurriéndose entre los dedos

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Ben Wedeman, corresponsal internacional sénior de CNN, estuvo casi dos meses en Baguz, en el norte de Siria, para reportar la resistencia final de ISIS. "No creo que haya dudas de que muchos militantes —cientos— se las arreglaron para escapar y pelear otro día", dijo. "Conforme las Fuerzas Democráticas de Siria cerraban el cerco sobre Baguz, hubo muchas oportunidades para escapar. La cantidad de combatientes de las fuerzas sirias era relativamente pequeña y grande el territorio que debían asegurar".

Es probable que muchos sigan escondidos en Iraq y Siria. Ya se ha visto que en Iraq, ISIS está adoptando una especie de insurgencia de bajo nivel; este año ha habido emboscadas y asesinatos de miembros de las fuerzas gubernamentales y militantes chiitas en varias regiones sunitas. En un informe de la ONU, publicado hace unos meses, se señaló que "esta red se está estableciendo a nivel provincial con una estructura celular que emula las funciones clave de la dirigencia central".

Estados Unidos asegura que ISIS ha sido eliminado al 100%

En enero, una célula latente de ISIS pudo perpetrar un ataque suicida en el que murieron 14 personas, entre ellas cuatro estadounidenses, en Manbij, en el norte de Siria, lejos del territorio reducido que todavía controlaba. Tan solo la semana pasada, los combatientes de ISIS llevaron a cabo un ataque sorpresa en Al Kawm, en el desierto, cerca de Palmira.

Aimen Dean, quien se unió a Al Qaeda en 1996 antes de volverse agente de los servicios de inteligencia británicos, dijo a CNN que estima que en la zona hay hasta 5,000 combatientes de ISIS.

La mayoría de las evaluaciones indican (aunque esta no es una ciencia exacta) que miles —no cientos de combatientes y planificadores de ISIS— pudieron escapar del califato luego de la caída de Mosul y Al Raqa, en 2017.

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"No sabemos cuántos murieron", dijo Edmund Fitton-Brown, coordinador del Equipo de Monitorización de ISIS/Al Qaeda/Talibanes de Naciones Unidas. "Sin embargo, podemos asumir que al menos el 50% sobrevivió. Yo creo que son más".

Algunas fuentes de los servicios de inteligencia dicen que algunos escaparon por Irán hacia la provincia pakistaní de Baluchistán y de ahí, a Afganistán. La propaganda de ISIS indica que consideran a India un territorio prometedor y que están decididos a agravar las tensiones entre musulmanes e hindúes en ese país. Otros regresaron a Jordania o a Arabia Saudita, en donde hubo un ataque inspirado en ISIS el mismo día de los bombazos en Colombo.

La red de ISIS en Libia se está reagrupando desde que la repelieron de la ciudad costera de Sirte y ha perpetrado varios ataques contra otras facciones libias este año.

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En Filipinas, un grupo pro-ISIS tomó el control de partes de la ciudad de Marawi durante cinco meses en 2017; el grupo contaba con muchos combatientes extranjeros.

"Indonesia, Malasia, Egipto, Arabia Saudita y Jordania: estos son los países a los que los combatientes regresan y que representarán una amenaza considerable", dijo Aimen Dean.

Estira y afloja

Además de los sobrevivientes del califato, endurecidos por la batalla, hay muchos simpatizantes de ISIS que resisten gracias a la radicalización en línea y a los predicadores extremistas. Aunque el colapso del califato pudo haber disminuido el atractivo de ISIS y aunque el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, presuma que "nos apoderamos del 100% del califato" , ciertamente no se ha extinguido. La dirigencia del grupo se preparó desde hace mucho para esta nueva fase de su existencia. Antes de que muriera en un ataque con drones, el portavoz de ISIS, Abu Mohamed al Adnani, dijo que la pérdida de territorios no significaba el fin del grupo.

"No: derrota es perder la voluntad y el deseo de pelear", sentenció.

La dirigencia de ISIS está muy afectada y sus comunicaciones y su planeación están perturbadas. Sin embargo, el mensaje sigue resonando. Edmund Fitton-Brown dice que los ataques inspirados en ISIS serán la nueva normalidad.

"Son individuos furiosos y radicalizados que responden a algo que ven en línea", dijo al Sentinel, la publicación del Centro para el Combate del Terrorismo.

Habrá quienes se adhieran a la ideología de ISIS; otros se inclinarán hacia Al Qaeda. En algunos lugares, como el Sahel, en el norte de África, hay signos de que empieza a haber cooperación entre miembros de ambos grupos. Aimen Dean, quien sigue muy de cerca los combates en Siria, dice que algunos excombatientes de ISIS están gravitando hacia Hurras al Din, un grupo alineado con Al Qaeda, en el norte de Siria.

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En algunos sentidos, es más difícil enfrentar a una estructura muy dispersa que a una altamente centralizada. Cortarle la cabeza a la serpiente tiene un efecto menor. Las filiales de Al Qaeda en África, Yemen y otras partes sobrevivieron e incluso prosperaron mucho después de que se aniquilara al mando central.

El banco del terrorismo

En donde ISIS tiene una ventaja esencial es en lo económico. Fitton-Brown dice que los estimados de sus bienes oscilan entre los 50 y los 300 millones de dólares. Hay otros estimados aún más altos. Los ingresos del califato se invirtieron en negocios legítimos, se blanquearon a través de bancos y prestamistas y literalmente se ocultaron bajo los tablones de los pisos.

Una pregunta importante sobre los ataques en Sri Lanka es cómo se financiaron. Dean estima que la operación debió haber costado entre 30,000 y 40,000 dólares. "¿Quién reunió esa cantidad y cómo la consiguieron?", se pregunta.

De igual manera, tras el ataque en Riad, la semana pasada, las autoridades saudíes catearon un complejo agrícola nuevo, cuya construcción, de acuerdo con las fuentes de Dean, debió haber costado casi 200,000 dólares. También encontraron mucho dinero en efectivo y armas.

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Entonces, la dirigencia de ISIS podría seguir teniendo el control de la distribución de los fondos. "El dinero definitivamente se sacó [de Iraq y Siria]", dijo Fitton-Brown. "Además, hay dinero y oro ocultos que se transfirieron a otras partes".

"El dinero en efectivo siempre está bajo administración de una autoridad máxima en la organización", dijo Dean. Las operaciones pueden llevarse a cabo a discreción de los grupos locales, pero el financiamiento rara vez depende de ellos. "ISIS es el banco del terrorismo", dijo Dean a CNN.

Un fenómeno mundial

En décadas anteriores, el terrorismo tendía a ser local o nacional. En 1998, Al Qaeda se anunció en el escenario mundial con ataques en el este de África, seguidos por los ataques del 11 de septiembre en Estados Unidos, tres años después. Ha llegado la era de la yihad transnacional. El alcance mundial del terrorismo ha crecido desde entonces a través de la radicalización en línea , los mensajes cifrados y las facilidades para viajar al extranjero.

Hay que tomar esto en el contexto de lo que Bruce Hoffman, en un artículo para el Consejo sobre Relaciones Exteriores, describe como intolerancia religiosa y tensiones sectarias en todas partes, "ya sea la islamofobia creciente, como en los ataques de marzo de 2019 en dos mezquitas de Nueva Zelanda; el antisemitismo creciente… los ataques irrestrictos del Estado Islámico contra cristianos en Egipto, Siria e Iraq, o los ataques de extremistas sunitas contra comunidades chiitas en Pakistán".

Este es el entorno en el que ISIS medra. Sus ataques de 2015 en París, Francia, por ejemplo, se pensaron para avivar el sentir antimusulmán . En donde quiera que los líderes del grupo se estén ocultando (probablemente en los desiertos del oeste de Iraq), estarán esperando a que se avive la animosidad religiosa en Sri Lanka.

Como dice Edmund Fitton-Brown: "Tenemos que vivir con una amenaza en el ambiente. Ese es el mundo moderno".

Tim Lister escribió el libro Nine Lives: My time as MI6's top spy inside Al-Qaeda junto con Aimen Dean y Paul Cruickshank.

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