En los pasados dos años, el diario nacional francés Libération ha dado prioridad a la cobertura de feminicidios y ha llevado a cabo una investigación profunda sobre los asesinatos que se han cometido a partir de 2017.
Gurvan Kristanadjaja fue parte del equipo de investigación. Dijo que los periodistas no deberían caer en la trampa de transformar estas historias en anzuelos para los internautas. Por eso, agregó, se ha esforzado más por analizar el lenguaje que se usa y los titulares destacados que exacerban el problema y contribuyen al clima de impunidad.
"En algunos artículos lees: 'Mató a su esposa porque no soportaba la idea de dejarla ir'. ¿Pero eso qué significa? Una vez más, se justifica la idea de la posesión", explicó Kristanadjaja a CNN.
"Se le iba su juguete"
Más que nada, la posesividad es lo que llevó al asesinato de Marie-Alice Dibon, de acuerdo con Hélène de Ponsay.
"Ya saben, se le iba su juguete. Entonces él prefirió romperlo que dejar que alguien más jugara con él", dijo De Ponsay mientras miraba fotos de ella y su hermana cuando eran niñas.
"Es devastador y vergonzoso que esto pueda pasar. Es un gran desperdicio. Es desperdiciar la vida de toda una familia", agregó, con sus ojos azul pálido llenos de lágrimas.
Hoy, De Ponsay es activista de la Unión Nacional para las Familias de las Víctimas de Feminicidios; usualmente relata la historia dolorosa de la muerte de su hermana con la esperanza de que obligue a Francia a encarar su problema de feminicidios y el problema más amplio de la violencia doméstica.
"El feminicidio es tan solo la punta del iceberg, la consecuencia de algo más grande. Y este algo más grande solo puede cambiar si la cultura cambia", dijo De Ponsay.
Barbara Wojazer y el periodista Sam Bradpiece, de CNN, contribuyeron con este reportaje.