La esperanza de un acuerdo de gobierno parecía vislumbrarse para numerosos israelíes, aunque otros reprocharon a Gantz, antiguo jefe del estado mayor del ejército, de haber dado un vuelco a su posición.
Pero la semana pasada, el mandato de Gantz expiró y el presidente israelí encargó a la Knesset, el parlamento, que propusiera en menos de tres semanas a otra persona para tratar de formar gobierno.
Mientras tanto, los campos de Gantz y Netanyahu, que disponen juntos de una mayoría de escaños en el Parlamento, prosiguieron sus negociaciones hasta alcanzar el acuerdo de este lunes.
Netanyahu celebró la conformación del gobierno que, dijo, "trabajará para salvar la vida y el bienestar de los israelíes", de acuerdo con un mensaje enviado en Twitter.
Se prevé que el gabinete tenga una duración reducida de tres años, en los que los dos dirigentes se alternen en la jefatura de gobierno.
Según informaron hoy medios locales, Gantz comenzaría ocupando el cargo de ministro de Defensa para luego hacerse cargo de la jefatura del Ejecutivo durante los 18 meses restantes.
A falta de que se concreten más detalles, se espera que el resto de los ministerios se repartan entre el Likud de Netanyahu y sus socios, los partidos ultraortodoxos y ultraderechistas, y los parlamentarios de la facción Azul y Blanco de Gantz. También podría incluir a diputados del Partido Laborista.
Gantz, cuya promesa electoral fue sacar del poder a Bibi (Netanyahu), habría accedido al requisito del mandatario de que el Likud tenga mayor participación en la composición del Comité de Nombramientos Judiciales, algo que podría ser decisivo en el juicio por corrupción contra el primer ministro previsto para el próximo mes de mayo.
Con información de EFE y AFP