No hubo apretón de manos cuando los dos septuagenarios subieron al escenario. Aunque esto se debió a las restricciones por la pandemia de COVID-19, la ausencia del saludo tradicional simbolizó la profunda división en el país en la cuenta regresiva hacia las elecciones del 3 de noviembre. El presidente de Estados Unidos, el republicano Donald Trump, y el ex vicepresidente demócrata Joe Biden, protagonizaron el martes en Cleveland, Ohio, su primer debate televisado, con un intercambio de insultos e interrupciones.
Con etiquetas como "títere de la izquierda radical", "cachorro de Putin", "ridículo", "payaso" y "poco inteligente", los dos candidatos a la presidencia en las elecciones del 3 de noviembre contrastaron su puntos de vista sobre el COVID-19, la integridad de la elección, la recuperación económica y la Corte Suprema.