En su último gobierno (2018-2022), Piñera se enfrentó al estallido social de octubre de 2019, cuando multitudinarias protestas reclamaron un giro contra un modelo de libre mercado con ausencia del Estado en educación, salud, pensiones.
A la convulsión social se sumó la pandemia por covid, creció la polarización política por el debate sobre el cambio de la Constitución y se hizo sentir una crisis económica que Chile no había vivido en 30 años.
Cuando los signos de recuperación le daban un respiro, la publicación de los Papeles de Pandora sobre la venta de la Minera Dominga en 2010 por parte de una empresa de sus hijos volvieron a empañar su imagen.
Piñera terminó su último mandato con una gran desaprobación popular.
Luto en América Latina
Los gobiernos de América Latina y de España expresaron su pesar por la muerte del expresidente Piñera, sorprendidos por el accidente que acabó con la vida de una persona jovial, hiperactiva, y que siempre buscó el diálogo, destacaron.
El brasileño Luiz Inacio Lula da Silva escribió en X: "Convivimos, trabajamos por el fortalecimiento de la relación de nuestros países y siempre tuvimos un buen diálogo".
A los mensajes de duelo de los mandatarios de Perú, Uruguay, Colombia y Argentina, se sumó el jefe de Gobierno español, Pedro Sánchez.
Destacó que durante su mandato se estrecharon lazos entre España y Chile: "Juntos hicimos posible la COP 25 en un momento crucial para la lucha contra la emergencia climática. Descanse en paz".