El Servicio Secreto confirmó que uno o varios de sus agentes "abrieron fuego contra un hombre armado" situado cerca de los límites del campo de golf de Trump en West Palm Beach. Junto al lugar donde estaba, los agentes encontraron un fusil AK-47 con mira telescópica, dos mochilas y una cámara GoPro.
El sospechoso escapó en un automóvil negro, pero un testigo ayudó a la policía a identificar el vehículo y las autoridades lograron detener al conductor.
"Ahora mismo tenemos a alguien bajo custodia que es un posible sospechoso", dijo en rueda de prensa el sheriff del condado de Palm Beach, Ric Bradshaw.
Trump estaba jugando en su campo de golf, cerca de su residencia de Mar-a-Lago, durante un día de descanso de la campaña presidencial, según varios medios.
"El presidente Trump está sano y salvo después de que se produjeran disparos en sus inmediaciones", indicó en un comunicado el director de campaña del magnate, Steven Cheung.
El propio Trump declaró en un mensaje para recaudar fondos de campaña: "¡No tengan miedo! Estoy sano y salvo y nadie fue lastimado. ¡Gracias a Dios!".
Las autoridades que intervinieron en la rueda de prensa este domingo no confirmaron si el atacante disparó en dirección del expresidente, pero los agentes del Servicio Secreto sí se enfrentaron al sospechoso.
"No estamos seguros en este momento de si el individuo pudo disparar contra nuestros agentes", dijo Rafael Barros, de esa agencia.
"Aliviados"
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y su vicepresidenta, Kamala Harris, se mostraron este domingo "aliviados" de que el exmandatario y candidato republicano Donald Trump esté "sano y salvo".
"El presidente y la vicepresidenta han sido informados sobre el incidente de seguridad en el Trump International Golf Course, donde el expresidente Trump estaba jugando al golf. Se sienten aliviados al saber que está a salvo", señala un comunicado emitido por la Casa Blanca.