"Animada"
El partido demócrata lanzó unos 15 millones de dólares en el distrito, inundando Omaha con comerciales.
Por su parte, con un presupuesto más limitado, los republicanos lanzaron el mes pasado una iniciativa para cambiar el sistema electoral de Nebraska, proponiendo que el ganador se lleve todos los votos de los colegios electorales.
El influyente senador estadounidense Lindsey Graham visitó la región para presionar a los legisladores, y el senador republicano local Merv Riepe tuvo una llamada con Trump. "Sólo me dijo 'Me importa Nebraska', y creo que con ese mensaje supimos por qué llamó, qué quería", dijo Riepe a la AFP.
Pero la propuesta falló, y el senador regional demócrata John Cavanaugh cree que el tiro le salió por la culata a los republicanos.
"La gente aquí estaba animada para votar por la vicepresidenta Harris, y ves que se animaron más como resultado de este intento de quitarnos nuestro voto", dijo.
Don Bacon, el diputado republicano que busca retener su escaño en Omaha, admitió que la mayoría de los locales quieren mantener su voto presidencial como está.
Pero cuestionó que los demócratas defiendan tan ferozmente que Nebraska siga dividiendo sus votos presidenciales, cuando estados liberales como California y Nueva York no lo hacen.
"Perjudica a los republicanos, sin duda", dijo a la AFP.
Residentes como Nancy Bohnenkamp concuerdan y quisieran cambiar el sistema del estado a uno en el que quien obtiene mayor votación se lleva todos los colegios electorales. "Como en el resto del país".
"Paren esta locura", dijo.