OPINIÓN: Las reuniones privadas de Trump son un gran favor para Putin
Nota del editor: Samantha Vinograd es analista de seguridad nacional de CNN; trabajó en el Consejo Nacional de Seguridad de Estados Unidos durante la presidencia de Barack Obama, de 2009 a 2013, y en el Departamento del Tesoro en la presidencia de Bush. Síguela en Twitter como @sam_vinograd. Las opiniones en esta columna pertenecen exclusivamente a la autora.
(CNN) - Cada semana, les doy una idea de la clase de análisis de información que podría pasar por el escritorio del presidente de Estados Unidos con base en el Informe Diario del Presidente que el director de Inteligencia Nacional prepara para Trump casi todos los días.
Este es el informe de esta semana:
Antes de las reuniones de alto perfil, los servicios de inteligencia de Estados Unidos suelen proveer al presidente de evaluaciones estratégicas de la situación y de qué se encontrará cuando se reúna con una contraparte extranjera.
OPINIÓN: El escandaloso esfuerzo de Trump por socavar a sus investigadores
Aunque el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, haya hecho caso omiso de estas evaluaciones en otras ocasiones y haya preferido ponerse del lado de los líderes extranjeros y no de los expertos estadounidenses en inteligencia, si opta por leer los análisis clave antes de su segunda cumbre con el líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, podría procesar información que le serviría para promover los objetivos de Estados Unidos en seguridad nacional.
La cruda realidad
Aunque Trump quiera seguir aplaudiendo la ausencia de pruebas nucleares norcoreanas como signo de que la amenaza ha disminuido, podría decirse que la amenaza nuclear norcoreana es peor ahora que cuando Trump asumió la presidencia. Trump ha ignorado las evaluaciones de los servicios estadounidenses de inteligencia sobre que Kim no se desnuclearizará tan fácilmente porque para el líder norcoreano, las armas de destrucción masiva son esenciales para la supervivencia del régimen.
Aunque Corea del Norte no haya llevado a cabo ninguna prueba nuclear ni de misiles en más de un año, el Organismo Internacional de Energía Atómica señaló que no ha congelado el desarrollo ni la producción de armas nucleares. El riesgo a corto plazo podría disminuir porque Kim está centrado en portarse lo suficientemente bien como para que Estados Unidos le haga concesiones; sin embargo, Corea del Norte sigue acumulando y dispersando armas nucleares, según un informe confidencial de la ONU, además de que es probable que crean que Trump está haciendo la vista gorda ante ciertas actividades con el fin de salvaguardar sus supuestos avances con Kim, lo que significa que el régimen sigue representando una gran amenaza para Estados Unidos y sus aliados.
OPINIÓN: El mundo anhela una era post Trump
La aparente incapacidad de Trump para describir honestamente la amenaza obstaculiza cualquier negociación que esté en curso. Hablar francamente con Kim sobre la amenaza que sigue representando podría ser el primer paso de cualquier conversación productiva sobre una desnuclearización real.
Ante esta realidad, lograr que Kim acceda al menos a congelar su programa nuclear en Hanói a cambio de una concesión acorde de parte de Estados Unidos, tal como la suspensión de nuevas sanciones, serviría para salvaguardar la seguridad nacional de Estados Unidos.
Mentiroso, mentiroso
La Casa Blanca contradijo el análisis de los servicios de inteligencia estadounidenses respecto a que es poco probable que Kim se desnuclearice e hizo referencia a las declaraciones de Kim como prueba de que habla en serio. Esta es probablemente una medida estratégica para que Kim se sienta comprometido a cumplir su palabra; sin embargo, los líderes norcoreanos no se han mostrado particularmente preocupados por cumplir. Creerle a Kim y no a los servicios de inteligencia es ingenuo y peligroso. Si Kim no presenta medidas reales de desnuclearización, es momento de ponerlo en evidencia. Los actos valen más que mil palabras, especialmente en temas nucleares.
Lee: Trump reta a las cortes con su declaración de emergencia nacional
Habrá presión de terceros
Andrew McCabe, exdirector interino del FBI, afirmó que Trump le creía más al presidente de Rusia, Vladimir Putin, que a los análisis de los servicios de inteligencia estadounidenses sobre las capacidades nucleares de Corea del Norte, así que surge una cuestión estratégica importante: Trump tiene que dejar de buscar consejo en el extranjero.
Varios líderes mundiales, entre ellos Putin y el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, probablemente traten de restarle importancia a la amenaza que representa Corea del Norte mientras presionan a Trump para que siga negociando con Kim porque sirve a sus propósitos, mismos que podrían ser contraproducentes para los objetivos de Estados Unidos en materia de seguridad nacional.
Trump ha dependido de un gabinete paralelo de líderes extranjeros en otras ocasiones. Además de que se ha reportado que accedió a retirarse de Siria tras hablar con el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha aceptado muchos consejos de Moon respecto a evaluar las intenciones de Kim.
Lee: Estados Unidos alcanza una deuda récord en la era Trump
En preparación para la reunión en Hanói, Trump debería entender que se espera que siga negociando pese a las presiones de terceros aunque la desnuclearización no sea realmente tema de negociación y que anuncie medidas importantes para alcanzar la paz aunque Kim no lo merezca. Es probable que los similares de Trump estén usando sus compromisos con él para presionarlo a declarar la paz en la península de Corea, lo que tal vez incluya un armisticio para poner fin a la Guerra de Corea porque les conviene, aunque no le convenga a Estados Unidos.
Rusia quiere que el statu quo no cambie para que Kim siga en el poder y para que haya menos probabilidades de un ataque militar estadounidense, de una posible intensificación de la presencia militar estadounidense en la región y de la llegada al poder de un líder más proestadounidense en Corea del Norte. China también quiere evitar un enfrentamiento militar.
Además, China es el socio comercial más importante de Kim y sacará ventaja económica si se levantan las sanciones y se reanuda el comercio con Corea del Norte. El presidente Xi Jinping seguirá promoviendo la continuación de las negociaciones y ahora Vietnam también tiene interés por ser la sede de la segunda cumbre. Corea del Sur está avanzando con sus proyectos de integración coreana, así que es probable que Moon también trate de hacer que Trump vea las cosas color de rosa para que su incursión diplomática no llegue a su fin.
OPINIÓN: Trump y sus mensajes sobre el socialismo
Kim quiere una tercera cita
Lo más probable es que Kim le proponga a Trump una tercera reunión. Extender las negociaciones a un futuro indefinido le sirve a Kim para comprar tiempo.
Trump ha dicho que no quiere apresurar la diplomacia con Corea del Norte. Dejando a un lado el hecho de que Trump ha criticado la política de "paciencia estratégica" de su predecesor, cada día que Kim finge estar "negociando" se traduce en un día más que puede dedicar a mejorar, aumentar y dispersar su arsenal nuclear. Aun el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, quien enfatizó la importancia de seguir por la vía diplomática, ha declarado que Corea del Norte no ha congelado su programa nuclear.
Hacer las cosas al revés
La Casa Blanca señaló que Trump está centrado en cuatro prioridades con Kim, con base en la declaración conjunta que firmaron en junio: transformar las relaciones entre Estados Unidos y Corea del Norte; establecer un régimen de paz permanente en la península de Corea; la desnuclearización, y la devolución de los restos de los estadounidenses muertos o desaparecidos en acción en la Guerra de Corea.
Lee: Trump no solo tiene un plan B para Venezuela, sino también un C, D, E y F
Kim devolvió algunos restos de soldados estadounidenses tras la cumbre de Singapur, pero es probable que Kim quiera presionar para que la desnuclearización sea el último tema que se toque, cuando debería ser la base para lograr los objetivos de Estados Unidos.
La amenaza nuclear de Corea del Norte seguirá creciendo si seguimos permitiendo que Kim nos distraiga con avances (reales o superficiales) en otros ámbitos. Trump debería poner énfasis en que las relaciones mejorarán y se establecerá una paz permanente siempre y cuando haya desnuclearización.
Que sea oficial
Si Trump quiere tener una negociación significativa con Kim respecto a la desnuclearización, tiene que dejar atrás las sesiones de fotos y las cartas de amor y establecer medios oficiales de inventariar los activos norcoreanos.
Lee: Una conciliación China-Estados Unidos inyecta optimismo al mercado accionario
Primero, una forma de lograrlo es que su equipo se involucre con el de Kim. Todo el tiempo adicional que los expertos estadounidenses puedan pasar con sus homólogos norcoreanos puede servir para obtener conocimientos invaluables sobre su conducta y sus intenciones. Trump puede lograrlo estableciendo lazos oficiales entre Estados Unidos y Corea del Norte, ya sea a través de una oficina de enlace diplomático o de reuniones de expertos en desnuclearización.
En segundo lugar, la desnuclearización no es tan complicada; el Organismo Internacional de Energía Atómica ha desarrollado, implementado y supervisado la desnuclearización de varios países, así que Kim y Trump deberían invitarlos a hacer un recuento de los activos norcoreanos.
Si no procesa los análisis de los servicios de inteligencia, lo más probable es que haya más de lo mismo: más proliferación nuclear norcoreana, más aceptación de Kim en el escenario mundial, más violación de las sanciones y más concesiones estadounidenses como la suspensión de las maniobras militares conjuntas, cosas que degradan la seguridad nacional de Estados Unidos.
Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión