Desafiar los límites para cerrar la brecha de liderazgo

Asimismo sucede con el rol de líder, asumir la responsabilidad de una gestión de proyectos, de personas, de una función, de un área o de una empresa, más allá de un título de coordinador, supervisor, gerente o director, hace heredero del rol de líder a quien asume la responsabilidad, pero esto no viene acompañado del instructivo adecuado para lograrlo efectivamente.

Los problemas que enfrentan muchas industrias actualmente para diseñar estos nuevos modelos de liderazgo radican en dos aspectos, que además coinciden en diversos estudios relacionados al liderazgo.
El primero es que el desarrollo de líderes es considerado cada vez más importante para las organizaciones, pero…la brecha del liderazgo está creciendo aceleradamente. En parte porque la capacidad de respuesta a través de las capacitaciones y los planes de desarrollo no son suficientes para preparar a los líderes de forma que puedan superar los desafíos de la era digital.

En mi opinión, ambos aspectos están siendo influenciados por macro tendencias como nuevas formas de hacer negocios y las características de la nueva fuerza laboral y sus necesidades tan heterogéneas.

Un buen ejemplo de los nuevos modelos de negocio y de la transformación de la economía es el mundo de las start-ups, donde los modelos de trabajo han cambiado y lo seguirán haciendo. Requieren titanes que sepan nadar en las aguas de la independencia, del intercambio y trabajo colaborativo y con habilidades para responder a los avances tecnológicos, al mismo tiempo que deben gestionar con mayor capacidad de impacto e influencia, lograr mayor compromiso y motivación de la gente, así como desarrollar la flexibilidad.

Las piedras del camino para lograrlo es que los líderes han sido entrenados para dar resultados y cumplir objetivos, ese es el principal rol y estos temas de gestión no son muy desarrollados en el ámbito laboral.

Mientras mantengamos el foco del liderazgo en el desarrollo de habilidades técnicas especializadas, en lugar de convertirlos en líderes ágiles, innovadores, disruptivos, capaces de evaluar y tomar riesgos, esas brechas se seguirán abriendo y los modelos tradicionales de liderazgo irán convirtiéndose en modelos obsoletos.

El rediseño del liderazgo necesita incluir en su ADN la disposición y actitud para desafiar los límites del pensamiento, de la acción y del manejo de las relaciones, acompañado claramente por nuevas destrezas tecnológicas y digitales.

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A nivel de pensamiento, la disrupción requiere que el líder pueda desarrollar formas diferentes de ver las cosas, entender el impacto del mundo virtual en el mundo real, pensar de manera divergente para crear soluciones y oportunidades poco comunes, inclusive poco populares a veces, además de toma de decisiones ágiles.

Nota del editor: Elizabeth Nejamen es colaboradora de Willis Towers Watson, compañía líder en asesoramiento, corretaje y soluciones. Las opiniones de este artículo son responsabilidad única del autor.

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