Déjenme empezar aclarando dos puntos sobre el actual ambiente que nos rodea. El primero es que en un mundo de 7.7 mil millones de personas -de las cuales 3.3 mil millones están desempleadas en la actualidad- actualizar sus habilidades es el comienzo de un nuevo viaje. A largo plazo, todo el mundo va a necesitar mejorar sus habilidades de alguna forma.
En segundo lugar, cuando la gente actualiza sus habilidades, no solo se beneficia la propia persona, sino también los negocios, la economía en la que operan, y la sociedad como un todo. El informe de PwC Global CEO Survey -presentado en Davos- revela una clara correlación entre optimismo económico, confianza en futuras ganancias y progreso, en relación a la actualización de habilidades profesionales.
Cuando se les pregunta por el crecimiento global en los próximos 12 meses, un 34% de personas con cargos directivos que afirmaron estar por delante en cuanto a habilidades laborales dijeron que "mejorarían", comparado con solo el 15% de personas con cargos de primeras ejecutivas que apenas están empezando a capacitarse de nuevo.
Y el 38% de personas primeras ejecutivas que se encuentran más avanzadas en el proceso de capacitación, tienen mucha confianza en sus perspectivas de crecimiento para los posteriores 12 meses, en comparación con el 20% que se sienten más atrasadas en su capacitación laboral.
Se ha descubierto que las personas con cargos de primeras ejecutivas que están atajando el problema y llevando a cabo acciones están más confiadas que aquellas que apenas están en el comienzo de su recorrido de 'recapacitación' o que apenas acaban de empezar.