Pero, al mismo tiempo, nos ha servido para revalorar a nuestro equipo de trabajo y a reconocer que, sin duda, son nuestro principal activo y un elemento clave para lograr salir adelante.
Una de las lecciones importantes que nos ha dejado la pandemia es el tema de educación financiera, que nos permita mantener nuestras finanzas personales en orden y contar con un ahorro para enfrentar gastos imprevistos y poder sobrellevar la incertidumbre financiera como la que viven muchas familias actualmente por recortes en gastos operativos o de nóminas ante una crisis a la que todavía no le vemos fin.
Un punto clave en esta ecuación es la falta de información que fomenta el uso de servicios financieros informales (tandas, ahorro bajo el colchón, solicitud de crédito a prestamistas), con frecuencia desventajosos y a costos elevados; y/o el manejo inadecuado de créditos que generan sobre endeudamiento.
Por ello, en medio de la incertidumbre financiera, uno de los mejores regalos que podemos ofrecer a nuestros colaboradores para disminuir su estrés en este rubro, es otorgarles la información clave para fortalecer sus conocimientos de educación financiera y puedan lograr un mejor manejo de sus recursos, no solo en circunstancias adversas como las que enfrentamos, sino como un acompañamiento a futuro que les otorgue una mejor calidad de vida, tanto para ellos como para sus familias.
Cursos sobre ahorro, inversión, endeudamiento, manejo de presupuesto y un sistema estructurado sobre éstos y otros temas básicos de finanzas personales, son solo algunas estrategias que podemos implementar en nuestras empresas para fortalecer los conocimientos de nuestros colaboradores y mejorar su salud financiera.
La crisis del coronavirus ha hecho que muchas familias se enfrenten a una situación complicada y adaptarse a unas circunstancias nuevas y adversas no siempre es fácil. Aquí es donde entra en juego la educación financiera: cuanto mayor sea ésta, mejor podrán afrontar los diferentes retos de la economía familiar y evitar que sean más proclives al endeudamiento. En una situación de crisis como la actual, contar con unos conocimientos básicos es fundamental para tomar las decisiones correctas.