Enfermedades mentales: principal causa de discapacidad
Se estima que para el 2030, la depresión será la principal causa de discapacidad. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) las enfermedades mentales se encuentran entre las más discapacitantes del mundo occidental. Tienen efectos superiores a los de la diabetes, el cáncer y las enfermedades cardiovasculares juntas. La soledad y el aislamiento social son dos veces más perjudiciales para la salud física y mental, que la obesidad.
Antes de la pandemia creíamos que el home office era lo mejor, hoy nos cuestionamos: ¿cuántas veces hemos trabajado después del horario de salida, saltado comidas para terminar pendientes o tenido junta tras junta? Es nuestra responsabilidad crear el balance entre vida personal y laboral para no ser parte de la estadística del 2030.
Apatía, letargo, desconexión, desesperación, estrés, ansiedad y agotamiento o burnout son algunos de los síntomas que probablemente has sentido o la gente que te rodea. El primer paso es reconocer que la relevancia de la salud mental es igual a la física. Hablar del tema es difícil, nuestro primer instinto es ocultarlo y dudamos mucho al momento de pedir lo que necesitamos.
¿Cómo sé si lo estoy haciendo bien?
Para medir el bienestar me baso en cuatro conceptos que te servirán para autocalificarte:
- Mentalidad - ¿Cómo quieres afrontar el día? Te recomiendo meditar por lo menos cinco minutos al día. Escoge con cuál palabra vas a afrontar el día y recuérdala a la hora de tomar decisiones.
- Nutrición – ¿Estás tomando suficiente agua y comiendo balanceadamente? Procura tomar un vaso de agua antes de tomar una decisión difícil, según un estudio publicado en la revista Psychological Science, disminuye el riesgo de tomar decisiones impulsivas.
- Movimiento – ¿Estás haciendo por lo menos 30 minutos de ejercicio? El ejercicio regular ayuda a darte energía y endorfinas.
- Recuperación – ¿Estás durmiendo bien? No sólo se trata de dormir bien, sino que cuando estás fuera del trabajo, realmente te desconectes.