Este entorno no es de corto plazo, y prueba de ello es que, hacia el futuro, se estima que las marcas continúen aplicando incrementos en precio para lidiar con los aumentos en costes tratando de mantener sus márgenes sanos.
En México existe una larga tradición de promociones de verano impulsada por el autoservicio que cada año promete generar verdaderos ahorros en los hogares por medio de sus promociones, siendo la más famosa la del 3x2.
Con los precios en franco ascenso, las estrategias promocionales de verano desarrolladas por detallistas y fabricantes sí ayudan al shopper a conseguir mejores rendimientos por cada peso invertido en los productos con descuento. Esto a su vez impulsa el gasto y el consumo de corto plazo en los canales que participan de estas iniciativas de verano.
Derivado de lo anterior, uno de los principales efectos de esta temporada promocional es el de llevar tráfico de otros canales, como el tradicional, a las tiendas de gran formato como el autoservicio, quienes suelen ejecutar y comunicar mayormente esta iniciativa.
El resultado de la temporada promocional de verano, aunque positivo, suele variar derivado del tipo de actividad (como pueden ser descuentos directos, estrategias de combos o múltiplos, y el muy famoso 3x2), la profundidad y vigencia de los descuentos, y las categorías involucradas y su dinámica de precios.
Por ejemplo, hoy en día encontramos que hay dos grandes grupos de categorías y productos en cuanto a su dinámica de precios en el año: un grupo que ha incrementado precios por debajo de la inflación anual oficial, y otro grupo que ha incrementado precios por encima de dicha inflación; en algunos casos con incrementos doble dígito altos.