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Cadenas de suministro, ¿resilientes o flexibles?

Hoy la escasez de autos, de medicamentos, de dispositivos médicos, entre otros, sigue siendo una realidad en pleno umbral de 2023, señala Daniel Razo.
jue 10 noviembre 2022 06:11 PM

(Expansión) - En diciembre de 2019 los primeros casos de COVID-19 fueron apareciendo en Wuhan, China. Conforme los contagios avanzaban en Europa, Estados Unidos o África, el pánico y la falta de conocimiento fue penetrando en la sociedad mundial mientras las muertes iban creciendo en escala.

Una parte de nuestro cerebro sigue funcionando de forma instintiva. Miles de personas abarrotaron los estantes de los detallistas al prevenir un prolongando encierro. Papel higiénico, alimentos enlatados, baterías, alcohol, mascarillas o cloro, solo por mencionar algunos productos, se agotaron en muy pocos días.

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Lo mismo pasó con las compañías cerveceras donde su inventario y producción se terminó, fue entonces que un empaque de seis cervezas llegó a costar más de 300 pesos en tienditas que administraron su pequeña riqueza; todo para tratar de aplacar la ansiedad. Algunas cadenas de suministro aún no acaban de recuperarse de este pico de demanda instintiva casi tres años más tarde.

Nos dimos cuenta de que hoy ninguna cadena de suministro es independiente y son sumamente complejas. Los dispositivos médicos, los autos y los videojuegos, por mencionar algunos ejemplos, compiten por los mismos escasos productores de microchips. También descubrimos que ni todos los contenedores del planeta, de todas las navieras, fueron capaces de trasladar mercaderías suficientes para abastecer la demanda de una población mundial en crisis y con miedo o pánico.

Hoy la escasez de autos, de medicamentos, de dispositivos médicos, entre otros, sigue siendo una realidad en pleno umbral de 2023. La pregunta es si en el futuro debemos construir cadenas de suministro resilientes a prueba de balas con recursos e inventarios sólidos o bien cadenas de suministro flexibles, capaces de leer y ajustarse rápidamente. Mi recomendación es tener una mezcla de ambas. Acá unas propuestas de hoja de ruta:

El costo de producción no es todo

El fabricante de calzado internacional VANS descubrió que de nada sirve tener un bajo costo de producción chino si debe mover su mercadería en contenedores de más de 16,000 dólares y que además deben esperar un mes varados en los puertos californianos para llegar a sus miles de tiendas en Estados Unidos de América.

La demanda de naves industriales en la frontera mexicana se ha incrementado un 40% de 2022 a la fecha; incentivos fiscales y la confirmación reciente de México en el tratado comercial soplan viento en popa a un fenómeno conocido como nearshoring. Tijuana y Ciudad Juárez son ejemplos de sedes en un pleno crecimiento de PIB y demanda laboral.

Siempre la planeación

Hoy el S&OP (Sales and Operating Plan) no es suficiente; las compañías modernas saben que están obligadas a planear con más frecuencia. Hay que poner termómetros constantes en los centros de consumo y demanda, pero es tal la cantidad de “datos” que prácticamente es imposible hacerlo con la mente humana. Es necesaria la ayuda de herramientas modernas de entendimiento y procesamiento.

Hoy el uso de BI (Business Intelligence o bien Inteligencia Empresarial) o también herramientas de Inteligencia Artificial han dejado de ser recursos de ciencia ficción para convertirse en facilitadores de empresas que buscan no “ahogarse” en el océano de datos y convertirlos en información relevante que facilite la toma de decisiones.

Estos modelos también permiten ajustar la propuesta on line de comercialización que rápidamente ha sustituido a los vendedores de puerta en puerta. Hoy un director que no usa la Inteligencia Empresarial es como un tuerto en tierra de poblaciones que tienen tres ojos.

Flexibilidad como tarjeta de presentación

Hoy existe gran cantidad de herramientas tecnológicas y físicas que permiten flexibilidad de producción. Algunos productores de pañales como la europea Ontex en Tijuana o Puebla puede producir con agilidad para México, Estados Unidos o Centroamérica pañales para bebés, toallas femeninas, productos para incontinencia ligera o bien pañales para adultos.

Esto claramente les permite ajustar las velas del barco ante un cambio de vientos. Otro ejemplo es la reciente compra de la compañía libanesa Interdeli y Deli por Grupo Herdez, que de la noche a la mañana puede empacar conservas, moles, hummus o jocoque seco y todo cerca de sus mercados objetivos.

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El siempre activo humano

Finalmente, pero no menos importante, es lo que nos ha enseñado la pandemia a colaboradores y líderes. A pesar de lo digital no debemos perder el contacto humano, la capacidad de celebrar, la posibilidad de conectar, de dar retroalimentación y la imperante necesidad de mantener la salud mental de todos.

La capacidad de resiliencia se ha puesto a prueba como nunca. No solo por la implementación de la NOM 035, hoy las empresas deben mantener un genuino interés por la salud y el balance emocional y físico de sus colaboradores.

Hace no mucho me preguntaron qué deberíamos promover en particular después de la pandemia. Mi respuesta es siempre la misma:
- Los valores en la empresa, el acoso debe ser intolerable y erradicado.
- La madurez emocional que logre acuerdos sin tantos platos rotos.
- La negociación y poner el interés de la organización.
- Su misión en el centro de los esfuerzos.

Hoy por hoy tener empleo que te rete y te remunere después de la pandemia es una verdadera bendición que debe ser honrada a diario.

Nota del editor: Daniel Razo es Director de Operaciones y Cadena de Suministro de Comerlat. Es Ingeniero Industrial por el Tecnológico de Monterrey. Síguelo en LinkedIn . Las opiniones publicadas en esta columna pertenecen exclusivamente al autor.

Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión

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