(Expansión) - A través de mis múltiples intervenciones, observo que uno de los elementos que requiere mayor optimización en las empresas, cuando están en el proceso de implementar buenas prácticas de gobierno corporativo, y en la creación del Consejo de Administración o Junta de Directores, es la efectividad en la selección del Consejero Independiente (o Director Independiente). Una efectiva selección del Consejero maximiza la probabilidad y efectividad de una gestión efectiva en las prácticas de la disciplina de gobierno corporativo.
Impacto del Consejero Independiente en el éxito sostenible de la empresa
Seleccionar un Consejero Independiente tiene unos atributos importantes. En primer lugar, tenemos que asegurarnos que los potenciales ejecutivos a seleccionar tengan una compatibilidad con el puesto. Que tengan lo necesario para satisfacer las demandas de avanzar la estrategia de la organización, influenciar en la creación de una cultura de logro, conocer cómo influenciar desde su posición como Consejero para optimizar la cultura organizacional, y ser un contribuidor de alto impacto. Esto con el objetivo de promover un crecimiento sostenible, añadir valor, mientras contribuye al balance de una gestión efectiva del riesgo.
Otros aspectos esenciales a considerar cuando se está seleccionando a un Consejero Independiente son:
- Experiencia. Se invita porque su experiencia es relevante para la necesidad actual del negocio, en especial la industria. Esto asegura que tiene un entendimiento de la dinámica empresarial, así como que puede proveer guía y valor en sus contribuciones.
- Expertise. Debe tener unas competencias en las que es experto, que sean relevantes para el éxito actual y futuro de la empresa, como son las de finanzas, comercial, marketing, capital humano, tecnología, estrategia, cadena de suministro, entre otras. Importantísimo es que esta experiencia sea complementaria con las competencias de los miembros actuales del Consejo de Administración o Junta de Directores.
- Independencia. Tiene que ser verdaderamente independiente y no tener ningún conflicto de intereses con la empresa o su administración. Deben ser capaces de proporcionar asesoramiento objetivo y desafiar, retar, cuando sea necesario.
- Integridad. Debe tener una reputación de integridad y comportamiento ético. Esto es esencial para mantener la confianza de las partes.
- Comunicación efectiva. No es opcional, tiene que ser competente en su comunicación, y ser capaz de comunicar eficazmente sus ideas, sugerencias y preocupaciones al Consejo y al equipo ejecutivo, en especial al Director General.
- Compromiso. Tiene que estar comprometido con su rol y estar dispuesto a dedicar el tiempo y el esfuerzo necesario para cumplir con sus responsabilidades de manera efectiva.
- Diversidad e Inclusión. Debe aportar una perspectiva diversa a la junta. Esto ayuda a garantizar que la junta sea representativa, incluyente, de las partes interesadas de la empresa y pueda tomar decisiones informadas que consideren una variedad de perspectivas.
- Colaboración y Trabajo en Equipo. La efectividad de un Consejo de Administración es el resultado de la colaboración y el trabajo en equipo de todos los miembros de este. Fomentar el trabajo en equipo optimiza la probabilidad de un gran impacto positivo por parte del Consejo, así como en la organización en general.
La selección de un Consejero Independiente jamás debe basarse en criterios subjetivos. He encontrado situaciones en donde este es seleccionado por criterios, tales como: “tiene experiencia como consejero”, “es mi amigo”, “lo conozco hace años”, “es ejecutivo de una empresa conocida”, “me lo recomendó un amigo”, “es amigo de mi amigo”, entre muchos otros. Los otros aspectos esenciales mencionados con anterioridad, deben ser la base al momento de buscar y seleccionar a un Consejero.
Con la selección acertada, basado en la compatibilidad de ese Consejero con el puesto, conocemos que estos añaden un valor importante a la empresa. Con unas prácticas de gobierno corporativo bien adoptadas, el Consejero Independiente juega un rol importante en proveer imparcialidad y objetividad en la gestión en la empresa. Entre muchos beneficios, podemos resaltar:
1. Contribuye con su experiencia en la creación de estrategias y con avanzar en las mismas.
2. Mejor toma de decisiones. Aportan nuevas perspectivas y opiniones imparciales al Consejo, lo que lleva a una mejor toma de decisiones, las cuales deben repercutir en un mejor rendimiento de la empresa.
3. Optimización en la rendición de cuentas. Los directores independientes se aseguran que la administración, sus ejecutivos, sean congruentes en sus acciones y que los mismos, y toda la empresa, sigan prácticas éticas y legales.
4. Mejora en la transparencia. Ayudan a garantizar que la empresa sea transparente en sus operaciones y procesos de gestión y de toma de decisiones, lo que lleva a una mayor confianza de los accionistas y otras partes interesadas.
5. Incremento en el valor para los accionistas. Basado en sus competencias, proporciona estrategias e información valiosa y experiencia, ayudando a la empresa a aumentar el valor para los accionistas.
6. Optimización en la gestión de riesgos. Ayudan a la empresa a identificar y gestionar los riesgos potenciales, asegurando que la empresa esté preparada para eventos y desafíos inesperados.
7. Mejor gobernanza. Ayudan a promover la adopción y prácticas de buen gobierno y se aseguran que la empresa se rija en el mejor interés de todas las partes interesadas.
8. Cultura Organizacional. Que no les quede duda, el Consejo es responsable por asegurar que la empresa tenga una cultura organizacional saludable. Por lo tanto, las contribuciones del Consejero no deben perder la perspectiva de que deben contribuir a esa optimización cultural.
Un aspecto importante en la medición de la efectividad del Consejero Independiente es que debe ser evaluado anualmente, como cualquier otro miembro del C-Suite, para medir su efectividad e impacto. Esto aplica a todo el Consejo también. Este está para añadir valor, avanzar la estrategia del negocio, mantener una gestión efectiva del riesgo, como a su vez mantener un balance en el apetito de crecimiento de la empresa.
Desafortunadamente, muchos confunden gobierno corporativo con una gestión del control férrea sobre el C-Suite, lo que provoca muchas limitaciones en las organizaciones. Este elemento, comúnmente visto, lo que crea es una organización lenta y burocrática.
En general, los directores independientes traen beneficios significativos a la empresa, incluida una mejor toma de decisiones, una mayor rendición de cuentas, una mayor transparencia y una mejor gobernanza. La efectividad e impacto se obtiene al encontrar un Director que tenga la combinación adecuada de experiencia, conocimientos, independencia, integridad, habilidades de comunicación efectiva, compromiso y diversidad para agregar valor en el Consejo, y ayudar a la empresa a ser sostenible en el éxito, en su viaje para alcanzar su Visión.
Nota del Autor: Milton Rosario es cofundador y Socio Director de The OD Consulting Group. Es experto en áreas de Cultura Organizacional, Estrategia, Gobierno Corporativo, Desarrollo de Liderazgo Ejecutivo y es Consejero Independiente. Síguelo en LinkedIn . Las opiniones publicadas en esta columna pertenecen exclusivamente al autor.
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