"Ciertamente el interés general de seguridad nacional del gobierno es significativo, pero (...) mientras que el gobierno ha establecido que las actividades de China suponen preocupaciones significativas de seguridad nacional, ha dado pocas pruebas de que la prohibición efectiva de WeChat para todos los usuarios en EU aborde esas preocupaciones", explicó la jueza en un escrito.
"Y como apuntan los demandantes, hay alternativas obvias a una prohibición completa, como vetar WeChat de los aparatos del gobierno, como ha hecho Australia, o adoptar otras medidas para tratar la seguridad de los datos", agregó Beeler.
Esta decisión supone una victoria para la empresa propietaria de WeChat, la tecnológica china Tencent Holdings, y la Alianza de Usuarios de WeChat en EU, una organización que asegura que no está vinculada a la compañía que presentó una demanda contra la Administración de Trump en agosto.
La jueza razonó que en los usuarios de WeChat en EU han expresado en su demanda "cuestiones serias" sobre la amenaza que puede suponer la orden del gobierno a sus derechos reconocidos en la Primera Enmienda de la Constitución estadounidense, que garantiza las libertades de expresión, culto, prensa y de reunión.
Y mencionó que esa red social es de utilidad para miembros de la comunidad chino-estadounidense o hablantes chinos en el país norteamericano.
"Las pruebas de los demandantes reflejan que WeChat es efectivamente el único medio de comunicación para muchos en la comunidad, no solo porque China prohíbe otras aplicaciones, sino también porque los hablantes chinos con poco dominio del inglés no tienen otra opción más que WeChat", razonó la magistrada.